¡No hay tiempo que perder! El próximo 17 de junio se celebrará la boda entre Tamara Falcó (41 años) e Íñigo Onieva (33 años) en El Rincón y la pareja ya está inmersa en los preparativos del que promete ser el enlace del año. Aunque Carolina Molas (53 años) siempre ha querido permanecer lejos del foco mediático, llegando incluso a protagonizar algún que otro encontronazo con la prensa, no puede negar que la reconciliación de su hijo y la marquesa de Griñón le ha hecho muy feliz.
Carolina Molas era captada por las cámaras a su salida de un centro comercial y no ha dudado en responder con amabilidad a las preguntas de los reporteros. En plena búsqueda de su vestido de madrina, la empresaria no ha ocultado sus nervios y es que quedan solo cuatro meses y todavía no ha tenido la oportunidad de pararse a pensar en todo lo que necesita.
La empresaria será quien ejerza de madrina en este día tan señalado para su hijo y, por tanto, para ella. Una cita inolvidable en el que tendrá un papel protagonista que la "enfrentará" de manera inevitable a Isabel Preysler, madre de la movia. Carolina no piensa dejar nada al azar y se postula como una de las mejor vestidas de la fiesta. ¡Todas las declaraciones en el vídeo!
Carolina Molas, con ganas de ser abuela
En los últimos días se ha especulado sobre la posibilidad de que Tamara Falcó estuviera esperando su primer hijo con Íñigo Onieva, una noticia que los propios protagonistas se encargaban de desmentir rápidamente. "Piano piano", exclamaba Íñigo, haciendo referencia a que el primer paso era la ansiada boda y después Dios dirá... Sin embargo y a juzgar por la sonrisa de Carolina, parece que la empresaria estaría encantada de ser abuela muy pronto. "Yo por mí fenomenal", declaraba.
El importante reto al que tendrá que hacer frente Carolina en la boda de Tamara Falcó e Íñigo
Carolina Molas tendrá un papel protagonista en la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva. Tal y como ha trascendido la empresaria ocupará el lugar de madrina mientras que Manolo Falcó, hermano mayor de Tamara, será el encargado de acompañar al altar a la marquesa de Griñón. En plena búsqueda de su vestido, Carolina se enfrenta a un reto mayúsculo en el que será inevitable que exista una comparación con Isabel Preysler.
Elegante y sofisticada, en sus apariciones públicas Carolina siempre ha presumido de tener mucha clase y gusto por la moda. De ahí, que todo apunte a que estará entre una de las mejor vestidas en el enlace. Como madrina y madre del novio, su look será uno de los más comentados y ella lo sabe. ¡Empieza la cuenta atrás!