No será fácil que Carlota olvide su paso por Gran Hermano. Más allá de la casa y la experiencia, la joven ha tenido que pasar por uno de los momentos más duros de su vida. La expulsión disciplinaria de José María desveló un turbio y desagradable episodio donde podría haber sido víctima de una supuesta agresión sexual. La concursante decidió regresar al formato y continuar con el que era su sueño. Ahora, tras la última expulsión, Carlota ha tenido abandonar y tampoco lo ha tenido fácil. El público la recibió con un sonoro abucheo...
Tenía que enfrentarse con Maico y sin haber estado nunca nominada. Carlota se ponía en manos del público por primera vez. La joven no imaginaba que más de un 60% de los votos dictaminaría que tenía que abandonar la casa. Mientras Maico agradecía el apoyo, la ya exconcursante corría hacia la puerta, dispuesta a dejar atrás la casa y todo lo que en ella ha vivido. El súper le pedía calma y que se sentase un rato. No iba a poder marcharse tan rápido.
No ha sido nada fácil el concurso para Carlota. El desagradable episodio con José María enturbió lo que iba a ser la experiencia de su vida. Una supuesta agresión sexual hizo que estuviese una semana fuera de la casa, atendida por psicólogos, pero, finalmente, decidió regresar. No pensaba dejar que nada ni nadie rompiese su ilusión. No le ha durado mucho, pues el público se ha encargado de expulsarla.
Jorge Javier interrogaba a la joven por la victoria de Maico. “Creo que es un caso de Iker Jiménez”, respondía. El plató se vino abajo con unos sonoros abucheos. No les había gustado nada el comentario -los aplausos al anunciar su expulsión ya nos habían dado una pista de que no tenía, precisamente, el cariño de los presentes-. Carlota continuaba como si nada pero su madre, presente en plató, explotaba muy molesta.
“Lo que no entiendo es el abucheo”, la respondía a Jorge Javier. “Yo no sé por qué gritáis de esa manera. Es un concurso, no hay que faltar, gritar ni perder la razón. El mundo nunca podrá ir bien con gente así. No es necesario”. La madre de Carlota se mostraba muy enfadada con el comportamiento del público. “Hay algo que se llama respeto”, puntualizaba. “Es un concurso, no es un circo romano”.
Con todo, también se sentía aliviada por la marcha de su hija. Desde la expulsión de José María, la madre de Carlota se había mostrado partidaria de que su hija no regresase a la casa, pero quiso respetar su voluntad. Ahora, ya fuera del reality, se sentirá mucho más tranquila y arropada.