Blanca Manchón revela las fuertes secuelas y heridas que sufre tras 'Supervivientes 2024'

Ahora que ‘Supervivientes 2024’ ha llegado a su fin, los concursantes poco a poco intentan volver a la normalidad, aunque esto es una tarea que les va a ser casi tan difícil como lo fue adaptarse a su estancia en la isla. Ya hemos podido ver a Gorka Ibarguren (29 años) recibiendo una dulce sorpresa al llegar a su hogar y también a Marieta (24 años) confesando lo mucho que está comiendo desde que ha vuelto a España, pero la adaptación tras haber pasado tres meses en las peores condiciones posibles, pasando hambre, durmiendo en el suelo de la playa y comiendo lo justo no es algo que sea pan comido. De hecho, una de las participantes del famoso concurso de Telecinco, Blanca Manchón (37 años), ha querido abrirse a través de sus redes sociales sobre lo que le ha supuesto a ella su regreso a España y cómo está gestionando la adaptación.

Blanca Manchón confiesa lo más duro de ‘Supervivientes 2024’

En un vídeo que ha publicado en su cuenta oficial de Instagram, la deportista ha querido compartir con sus seguidores “las consecuencias de estar 100 días tiradas en una isla desierta”, sin duda, una difícil tarea y un duro reto al que se ha enfrentado Blanca junto a sus compañeros de reality. "Antes de que desaparezcan mis marcas y mi mente se asiente… aquí tenéis. Estas son algunas de las cosas más impactantes que me he encontrado al volver a la civilización", escribía la windsurfista en este post, donde aseguraba que “lo más radical al volver han sido los ruidos”, afirmaba la joven, que se mostraba sorprendida por el sonido de “una sirena o el pito de un coche". De hecho, Blanco asevera que cuando se subió en "el avión de vuelta aluciné, quería salir de ahí", afectándole bastante también "caminar por una calle con mucha gente con muchas conversaciones a la vez”, comentaba, dejando claro que la tranquilidad que han vivido estos meses en esa isla nada tiene que ver con la cantidad de ruidos a los que estamos acostumbrados en nuestro día a día, sobre todo si vivimos en una gran ciudad.

 

 

 

 

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Además, Blanca reconocía llevar “bastante mal el comer con cuchillo y tenedor”, ya que está acostumbrada a comer con las manos, como ha hecho durante todos estos meses: “no puedo ver una comida por ahí y no guardármela o comérmela directamente”, confesaba. A esto se suma las noches, cuando se encuentra en su cama y no consigue conciliar el sueño, momento en que llegan las “4 de la mañana, me tiro al suelo, duro y frío y duermo como un bebé”, comenta entre risas.

Las grandes marcas físicas tras ‘Supervivientes’

Pero no todo son secuelas psicológicas o costumbres, ya que en este mismo vídeo Blanca reconoce tener “muchas heridas de guerra”, momento en el que muestra en este reel las terribles marcas que tiene por su cuerpo, lleno de heridas, arañazos y moretones, resultado de estos tres meses en la isla y sometiéndose a las duras pruebas que el concurso les pone cada semana, así como de “los mosquitos, de recoger leña...”, retos que han acabado con su cuerpo “destrozado”. “En fin, que esto ha sido todo un shock e iré poco a poco adaptándome a mi vida normal", aunque confiesa que ha sido “una experiencia increíblemente brutal e inolvidable".

Además, en sus historias temporales Blanca ha compartido un vídeo en el que podemos verla junto a su familia yendo a hacer la compra semanal a un conocido supermercado. Allí confesaba estar “abrumadísima” por todos los productos que tenía delante, una muestra de que volver a la vida normal va a ser algo bastante duro para todos los participantes de este concurso.

La gran decepción de Blanca Manchón en ‘Supervivientes’

Aunque la deportista ha tenido que sufrir diferentes secuelas físicas tras el programa, Blanca también se ha llevado alguna que otra decepción con algunos de sus compañeros, tal y como ella misma comentó cuando llegó al plató de Mediaset, donde dio una sincera y tajante entrevista. En esta charla, Blanca fue muy crítica con uno de los supervivientes, con el que aseguró no tenía nada de conexión: "Con Gorka he entendido que nunca ha existido ese vínculo. Me tenía más inquina que al resto de las chicas, no sé si por la competencia, pero nunca hemos llegado a congeniar", aseguraba a Sandra Barneda.

“Él me decía que me admiraba mucho, que era la mejor superviviente. Y yo le decía que demostrara sus palabras con hechos, pero no lo hizo. Así que a Gorka le quité. Nos llevamos bien, pero ya está. No espero nada más de él”, sentenciaba la deportista, que tachó al vasco como su gran decepción del concurso. Aun así, la sevillana también comentó que ella misma ha hecho cosas mal a la hora de participar en este duro programa: "Evidentemente me he movido mal, pero por no tener ni idea de moverme en un 'reality'. He pensado que se iba a ver más la supervivencia y después he intentado hacer amistades para llevar mejor el concurso".