La Familia Real llegaba el fin de semana pasado a Palma Mallorca para iniciar sus tradicionales vacaciones de verano. Este año la familia ha decidido poner especial hincapié en la imagen más cercana de sus miembros y ya desde el posado de verano, en el que estuvieron unos largos minutos conversando con la prensa, trataron de mostrar una imagen más natural.
Como siempre, los looks de la Reina Letizia han sido analizados al detalle y son muchos los que han aplaudido y también criticado las elecciones que ha hecho la reina durante su estancia en la isla balear.
Por un lado, en su primera aparición en la isla durante el posado de verano, la reina escogió un estilismo ibicenco muy diferente de los posados anteriores. Esta vez se decantó por un vestido troquelado de Hugo Boss, sin mangas, con la cintura marcada y falda de vuelo. Como zapatos Letizia escogía unas cuñas de esparto muy a la moda de Mint & Rose y complementaba el look con un bolso modelo Inro de Carolina Herrera, de color beis topo y unos pendientes en forma de estrella de Chanel que ya le hemos visto en numerosas ocasiones.
A principios de semana el centro de la ciudad de Palma era sorprendido por el paseo que la reina Letizia, sus hijas y la reina Sofía realizaban. Para la ocasión, la reina optó por un look más sencillo y veraniego. Esta vez apostó por una camiseta sin mangas y con degradado rosa de Mango, unas bermudas blancas, un bolso de mimbre con asas cortas de White Llily y unas cuñas.
Durante la noche del miércoles, la Familia Real volvía a regalar una estampa de lo más natural asistiendo a la actuación del violinista libanés Ara Malikian en el Port Adriano Music Festival. Si en el mercado Letizia sorprendía por su look más informal y por vestir shorts, esta vez acaparaba las miradas con un estilismo más atrevido y de inspiración lencera. Para la ocasión la reina, que se veía mucho más bronceada, vistió un cuerpo de satén blanco y unos pantalones de tiro alto negro. Como calzado escogía unas sandalias negras trenzadas de la marca Naguisa y una cartera de mano negra. Asimismo destacó por lucir unos aros XL de oro blanco y diamantes. Este estilismo ha dado mucho de qué hablar, puesto que ha sido elogiado por algunos y criticado por los que consideran que no era apropiado para la ocasión.
Pero sin duda el look más aplaudido ha sido el que lucía la noche de ayer durante la tradicional recepción en el Palacio de la Almudaina. La reina combinó una falda floreada de corte midi de Carolina Herrera en tonos azul marino y naranja con un top naranja cuello perkins de Hugo Boss que resaltaba su bronceado. En cuanto a los complementos, lució unas sandalias azul marino de Magrit y se recogió el pelo en una favorecedora coleta que dejaba entrever sus pendientes de oro blanco.