Cuando el amor es verdadero, no es necesario proclamarlo a los cuatro vientos. El amor real se palpa, se percibe sin más "publicidad" que la de ver cómo se miran o se hablan los enamorados. Y eso, puro amor, es lo que desprenden Anne Igartiburuy Pablo Heras en cada aparición pública y lo que desprendieron durante el Mutua Madrid Open de Tenis. El matrimonio acudió a la Caja Mágica para disfrutar del partido de Rafa Nadal, que venció contra el francés Gaël Monfils, y durante el partido no dejaron de regalarse gestos de cariño y complicidad.
Cuatro años después de enamorarse durante una entrevista radiofónica y dos años y medio después de haberse dado el 'sí, quiero' por sorpresa, Anne y Pablo siguen tan enamorados como el primer día: solo hay que mirarles para darse cuenta. Aunque ambos ocultaban su mirada tras las gafas de sol, sus gestos, sonrisas y abrazos dejaban más que claro que siguen viviendo en una eterna luna de miel. Anne, por su parte, ya ha expresado en más de una ocasión el profundo amor que le une a su marido: "Estoy tan a gusto con él, Pablo es alguien que da sentido a mi vida", ha declarado.
La presentadora y el director de orquesta se convirtieron en papás el 5 de junio de 2016, cuando nació su hijo Nicolás. Un niño que ha llenado su casa de alegría y que ha convertido a su núcleo en familia numerosa al unirse a las dos hijas de Anne, Noa y Carmen. De hecho, hace pocos días pudimos ver a la familia al completo disfrutando de una escapada a la montaña durante el puente de mayo.