El desencuentro entre Anabel Pantoja y Junco en el tanatorio de Alcalá de Guadaíra, durante el velatorio de los restos de Bernardo Pantoja, no termina de aclararse ya que, según la versión que se escuche, nada tiene que ver con lo que se hizo público en televisión. Inicialmemte, se comentó que en el tanatorio, Anabel y una de las amigas de Junco tuvieron un fuerte encontronazo en el que, al parecer, incluso llegaron a las manos. Se dijo también que a Junco no la habían avisado del momento en el que Bernardo, su marido, falleció. Por la noche, en el 'Deluxe', Belén Esteban desmintió estas informaciones.
"Me hubiese encantado que muchos hubieran visto lo que yo he visto hoy. Cuando Bernardo muere Junco está a los pies de la cama de la mano de Isabel Pantoja... Lo de que echaron a Junco o que no le dejaron entrar a la habitación es mentira... Hoy [por ayer] tanto Anabel como Junco se han metido solitas en la sala [del crematorio] y han estado tres cuartos de hora las dos solitas. Anabel ha dado sitio a Junco. Anabel como hija y Junco como viuda... En la iglesia Anabel estaba al lado de su madre Merchi y de Junco", explicó Belén. José Antonio León, reportero de 'Sálvame', respondió: "Todo lo estamos suavizando precisamente porque queremos a Anabel".
El polémico tema ha continuado en el día de hoy. 'Socialité' ha hablado con un periodista –del que no han querido desvelar su identidad–, que ha explicado que las diferencias entre Anabel y Junco vienen de atrás. El periodista ha comentado que, estando Bernardo aún en el hospital, Junco llevaba un collar (una cadena de oro) de su marido y Anabel se lo arrancó de malas maneras. “Esto no es tuyo, es de mi padre”, le dijo a Junco. Y luego añadió: “De la casa de mi padre te vas a marchar y yo lo voy a ver”. Ante esa agresividad verbal, Junco se quedó sin saber qué decir y se marchó al comedor del hospital con una amiga y con Sylvia Pantoja. Esto según la versión de este periodista.
María Patiño, por su parte, ha contado que ella no estuvo allí, pero que Belén Esteban le había contado que esa cadena se la había regalado Merche –la madre de Anabel Pantoja– a Bernardo y que pertenecía a la madre de Merche, y que por esa razón Anabel se la pidió. Patiño también ha dicho que Belén le ha contado que Anabel se ofreció a Junco para ayudarla a obtener una pensión de viudedad y que en el primer banco de la iglesia estaban sentadas Merche, Anabel y Junco, es decir, que existe una buena relación entre ellas.
Otra de las versiones puestas sobre el tapete la ha ofrecido Diego, un amigo de Bernardo Pantoja, a 'Socialité'. Según este testimonio, "la amiga de Junco, en el tanatorio, le metió los dedos en los ojos a Anabel, mientras la insultaba. Anabel se comportó con mucho respeto por la persona que estaba allí, que era su padre". ¿Quién dice la verdad?
María Patiño ha aprovechado para explicar de manera somera la historia de Bernardo y Junco. “Junco era una bailaora apasionada por el flamenco. Muy joven, se fue a Sevilla y alquiló una habitación en Triana para vivir cerca de lo que es flamenco. Merche, por su parte, era una funcionaria, no tenía nada que ver con Bernardo, pero se casó con él, que era, imagina, del clan Pantoja. Cuando se separaron fue una separación complicada. Tanto Isabel Pantoja como Merche decidieron proteger a Anabel de la vida y las malas compañías que Bernardo frecuentó tras la separación. Bernardo acabó en la cárcel, motivo por el cual Anabel y su padre no tenían relación. Con los años se reencontraron y, a su manera, volvieron a estar unidos. Junco siempre ha estado al lado de Bernardo, discreta. Ni Isabel Pantoja ni nadie de la familia fueron a la boda de Bernardo y Junco porque se casaron en secreto en 2018”, ha comentado Patiño.