Anabel Pantoja tras la entrevista de Isabel Pantoja: "Me siento más orgullosa de trabajar con mi tía"

La colaboradora ha entrado en directo en el programa para responder a la opinión de la tonadillera sobre su trabajo en 'Sálvame'...

Anabel Pantoja

Tantísimos años esperándolo que ya pensábamos que nunca iba a ocurrir. ¡Isabel Pantoja en Sálvame! ¡Cómo en los viejos tiempos! La tonadillera, henchida de felicidad por el nacimiento de su nieta Carlota, quiso atender a la prensa y responder a todo lo que se le preguntó. Entre ello, claro, el papel de su sobrina Anabel en televisión -o mejor, el papelón-. A la tonadillera no le hace ninguna gracia pero, ¿qué piensa Anabel de todo esto? ¿Cómo se ha tomado las palabras de su tía?

No lo tiene fácil. Acudir a un puesto de trabajo donde van a hablar mal de tu familia sistemáticamente no es un buen trago para nadie. Claro que eso supone un sueldo y la posibilidad de pagar las facturas a finales de mes. Anabel Pantoja vive en una encrucijada. Por un lado, trabaja en Sálvame como colaboradora, por otro, tiene a toda su familia -o casi- enemistada con el programa. ¿Qué puede hacer, la pobre? Pues defenderse de la mejor manera y angustiarse de vez en cuando.

Tras la entrevista a Isabel Pantoja, queda claro que a la cantante no le gusta un pelo que su sobrina trabaje en Sálvame. “A mí me gustaría que mi Anabel viviera de otra cosa, no es su sitio”, explicaba a los reporteros. “Sencillamente porque ella no tiene que defender nada”. Pantoja aseguraba que le dolía su sobrina porque la adora. “Los que están ahí tienen un pedazo de mochila, la más grande. Quiero que mi niña no llore más. Ella no tiene que defender a nadie y de nada”.

Un sentir que, la verdad, ya nos imaginábamos. Pero, ¿y Anabel? ¿Qué piensa de las palabras de su tía? Menos mal que en Sálvame están a todo y mandaron a José Antonio León para que pudiese entrar en directo. “Es lo que siempre me preguntáis. Qué mejor manera de haberlo comprobado”, respondía Anabel. “Ella sufre, lo pasa mal”. La colaboradora aseguraba que ella había elegido trabajar en Sálvame y que nadie le había obligado. “Y lloro porque soy muy sensible. Me afecta todo más y no soy tan fuerte”.

Con todo, estaba claro que Anabel se posicionaba del lado de su tía. Las preguntas de los colaboradores hacían que se fuese rompiendo. “No traiciono a mí tía por trabajar en Sálvame. A ella no le gusta que vaya porque lo paso mal”, explicaba. “Me siento más orgullosa de trabajar con mi tía que en Sálvame. Me gusta que me llaméis pero es la verdad”. Evidentemente, si Anabel tuviese otra forma de ingresar el mismo dinero, no sería Sálvame su primera opción para trabajar.

Si tuviese un trabajo donde no paso lo que he pasado ahí, por supuesto que estaría en otro trabajo”, confirmaba Anabel. Es entendible, contando el sufrimiento que le acarrea cada tarde. Ahora, también le compensa. Como dijo Jorge Javier, si fuese una reputada abogada, se entendería que no le apeteciese ir. Pero con el currículum de Anabel...