Desde hace seis años, Anabel Pantoja es una persona nueva. La sobrina de Isabel Pantoja decidió coger las riendas de su vida y poner solución a su problema de obesidad. Si bien reconoce no haber sufrido serios complejos por su sobrepeso, sí que ha enumerado algunos de las situaciones que sí le producían un problema para estar cómoda y a gusto con su cuerpo.
"Me daba vergüenza ir a la playa o ir a comprar ropa, porque tenía que ir a comprarla a tiendas de señora donde se vestía mi madre. De hecho, mi madre, tenía menos talla que yo en su día", recuerda. "Antes vivía con mi abuela, que tenía su casa en un segundo piso sin ascensor, y lo pasaba fatal", ha apuntado también.
La tertuliana de 'Sálvame' llegó a la conclusión de que no podía continuar así, porque estaba afectando seriamente a su salud, y consideró el anillo gástrico como la mejor para sus circunstancias. Y cuales era su situación: pues la de una chica joven sin voluntad para hacer dieta. "No tengo voluntad, y ahora que me veo bien, aún me cuesta trabajo mantener la línea y no engordar", reconoce. "Decidí ponérmelo porque, después de barajar hacer una dieta natural con una nutricionista o someterme a una reducción de estómago o ponerme un balón gástrico, me decanté por el anillo", continúa narrando.
Anabel, que tuvo en todo momento el apoyo de los suyos, no estaba preocupada por la operación, pues confiaba totalmente en las manos de los profesionales que había elegido; sin embargo, reconoce que la poca información que todavía existía de casos de anillo gástrico la inquietaba bastante. "En aquella época me daba mucho miedo, porque nunca me había metido en un quirófano. No me lo pensé ni dos días y apenas lo noto", confiesa.
Al poco tiempo, empezó a notar cambios físicos, pero también más profundos. "A mí, me ha cambiado totalmente. Perdí 30 kilos aproximadamente y no me veo la misma persona que era antes. Cambia totalmente tu vida. Hay cambios bruscos como, por ejemplo a la hora de comer, que te sacias muy rápido. Como decía mi primo Kiko, te operan el estómago pero no el cerebro, y lo pasas mal. Ahora me veo más ágil y capaz de jugar y brincar sin parar con mis sobrinos. Y también llegué incluso a bajar dos números de calzado, de un 41 a un 39", confiesa.
La sobrina de Isabel Pantoja sigue apostando y recomendando a sus seguidores que intenten seguir una dieta acompañada de ejercicio antes de pensar en pasar por el quirófano como ella, y siempre con la supervisión de profesionales.
La tertuliana de 'Sálvame' sabe que sigue siendo una lucha contra sí misma, y actualmente aborda su nuevo objetivo: "Ahora he engordado como unos ocho, que son los que estoy intentando bajar. Ya me quedan cinco".