Anabel Pantoja le pone fecha a su vuelta a Sevilla por un motivo muy especial

Anabel Pantoja es feliz. En medio de la delicada situación en la que se encuentra por la investigación abierta por presuntos malos tratos en la que se ha visto inmersa tras el ingreso hospitalario de su hija, la influencer ha conseguido olvidar, al menos durante unos días, el desagradable proceso judicial al que podría enfrentarse. 

Anabel Pantoja y David Rodríguez abandonaban Canarias tres meses después de convertirse en padres. Un sueño hecho realidad en el que han pasado por Córdoba y Sevilla; y han tenido la oportunidad de reencontrarse con muchos de sus seres queridos. 

De entre todos los planes que Anabel ha hecho durante estos días en la capital andaluza, no pudo dejar de visitar a Jesús El Cautivo. "Tenía que venir a verte", escribió. Una promesa que seguro le hizo durante las semanas que su hija estuvo ingresada en el hospital. Ahora, de vuelta en Gran Canaria, la influencer ha anunciado la fecha en la que muy probablemente volverá a Sevilla. 

Anabel ha rescatado una imagen del interior del templo en la que aparece su hija frente al altar y junto a la que escribía: "hasta el lunes 14, mi Señor". Tomando nota de sus palabras, todo parece indicar que la influencer tiene previsto pasar la Semana Santa en Sevilla junto a su familia y sus amigos de siempre. 

A lo largo de estos meses, Anabel Pantoja se ha refugiado en la fe. Pidió a Dios por el bienestar de su hija y después de ver cómo la pequeña se ha recuperado por completo, no puede hacer más que agradecer. 

El reencuentro familiar de Anabel Pantoja con Kiko Rivera e Isa Pantoja, por separado

La breve estancia de Anabel Pantoja en su Sevilla natal ha estado cargada de momentos felices y reencuentros. La influencer ha aprovechado la ocasión no solo para pasear por la ciudad que la vio nacer junto a su hija sino también para hacer las presentaciones de rigor a sus seres queridos. 

Isa Pantoja no dudó en trasladarse hasta la capital andaluza para conocer a la pequeña Alma. Un encuentro privado, en la más estricta intimidad. "En el hospital nadie pudo conocerla y ahora hemos aprovechado todos para conocerla. Lo importante como siempre es la niña", declaraba Isa Pantoja 

Muy diferente fue el encuentro con Kiko Rivera e Irene Rosales. La pareja no faltó a una gran celebración que tuvo lugar en la casa de un amigo de Anabel. Una gran fiesta a la que también se unió Raquel Bollo y, por supuesto, la abuela Merchi. "Gracias Andalucía, Hogar, Familia, Amigos sois para siempre (...) No tengo palabras para agradeceros la energía que me habéis dado mis sobrinos de mi alma, nunca mejor dicho. Os ama vuestra tata", escribía la influencer a modo de resumen antes de coger un avión rumbo a Canarias. 

"Mi princesa me ha dado vida estos días y he podido disfrutar de ella y cumplir todo lo que prometimos, y aún nos queda algunas visitas más", le respondía una emocionada Merchi.

La cita que podría reunir a toda la familia Pantoja

Ante la incertidumbre del resultado definitivo de la investigación por presuntos malos tratos, Anabel Pantoja sigue adelante con su vida y, tal y como adelantaron desde el programa 'Mañaneros' de TVE,  ya planea la celebración del bautizo. Aunque se desconocen los detalles de la celebración, no sería de extrañar que fuera en Sevilla. Eso sí, el deseo de la influencer y de su pareja es que todo ocurra en la más estricta intimidad. 

Esta cita tan señalada podría ser una oportunidad de oro para que Kiko Rivera e Isa Pantoja se vean de nuevo después de ese fugaz acercamiento en el hospital el pasado mes de enero. "El amor por mi hermano no tiene fecha de caducidad. No quiero emocionarme ni hacerme ilusiones (...) El gesto fue superbonito por su parte. Le deseo lo mejor, que sea muy feliz con su familia", declaraba Isa en ese entonces dejando las puertas abiertas a una hipotética reconciliación. 

Lo que es más que evidente es que Isabel Pantoja no entra en esta ecuación. Se desconoce si la tonadillera también ha tenido la oportunidad de tener en brazos a la pequeña Alma, pero no quiere ningún tipo de vínculo con ninguno de sus hijos.