Le diagnosticaron cáncer de mama en estadio 1 en 2010, pero Ana Rosa Quintana no lo contó hasta ocho años más tarde. El 19 de octubre del 2018, la presentadora, en su programa, contó cómo llevó y cómo venció la enfermedad, y lo hizo, sobre todo, por un motivo que ahora ha desvelado.
La periodista acudió en la noche del 7 de noviembre a una cena solidaria de la Fundación Querer y allí atendió a los medios por primera vez desde que hizo pública su historia con el cáncer. “Mi caso no fue el de otras compañeras”, ha contado a los reporteros, “lo mío fue un susto cogido a tiempo. Mi madre nunca se enteró. No quise que se enterara, y la única forma para esto era no contárselo a nadie”, ha explicado acerca de por qué no compartió antes su caso. “también pensé si se reproducía o si no iba bien… a la gente la asustas; ahora, ocho años después, ya puedes decir ‘lo he tenido, he seguido con mi vida y no me ha pasado nada’”.
“Ahora lo he contado por un único motivo: para que las mujeres no dejen de hacerse mamografías. Muchas veces nosotras nos olvidamos de nosotras mismas. Si yo no me hubiera hecho una mamografía, probablemente no estaría aquí”, ha resuelto tratando de dar ejemplo por el bien todas.