Ana Obregón, exultante en el bautizo de su nieta Ana Sandra: la ausencia que no consiguió empañar su felicidad

El día más esperado por Ana Obregón (68 años) por fin ha llegado. La presentadora ha celebrado el bautizo de su nieta Ana Sandra. La actriz no quería cerrar el año sin reunir a su familia y amigos en este evento en el que la pequeña se ha convertido en la gran protagonista y en el que el recuerdo de Álex Lequio ha estado muy presente.

El bautizo de Ana Sandra no ha estado exento de polémica. Durante semanas, se ha comentado mucho el hecho de si Alessandro Lequio iría o no a esta jornada tan señalada para su nieta. Finalmente, ha decidido no estar, pero el día de hoy ha sido momento para dejar a un lado los malos rollos. Ana Obregón se ha centrado en disfrutar en compañía de sus seres más queridos.

Ana Obregón en el bautizo de Ana Sandra.

Ana Obregón dejó el blanco y el negro, que llevó durante todo su luto por la muerte de su hijo Aless, para vestir de colores. El rosa ha sido uno de sus tonos favoritos y es que, como ella misma ha contado, su vida se tiñó de rosa cuando llegó Ana Sandra al mundo. Ha sido el color que ha llevado hoy.

Un vestido rosa fluido, con la falda larga y plisada, que ha combinado con una chaqueta de lana o tweed con la cintura ceñida a tono para regugiarse de las bajas temperaturas. Ana Obregón ha optado por accesorios rosas, con una diadema ancha rosa y zapatos de salón del mismo color. Muy elegante. Aunque el mejor complemento de su estilismo ha sido su gran sonrisa y el brillo de sus ojos. Ana Sandra le ha devuelto la vida a su abuela y hoy ha sido más evidente que nunca.

Los padrinos de bautizo de Ana Sandra, la nieta de Ana Obregón

Entre los invitados más destacados, han estado los padrinos de la pequeña. Ana Obregón tenía claro que quienes ejercieran este rol, tenían que ser personas relacionadas con su hijo Álex Lequio. Como madrina, la actriz decidió que fuera su sobrina Celia la que ostentara este título. Además, ella es la tutora legal de la niña. Si en algún momento Ana no pudiera hacerse cargo de la pequeña, sería su sobrina la que lo haría. El hecho de haber ejercido hoy como madrina, ha sido el fiel reflejo de la confianza que su tía tiene en ella. Además, para Álex, Celia era como una hermana.

Como padrino de Ana Sandra ha ejercido un amigo íntimo de Aless. En un primer momento, la actriz había pensado en Justin, el mejor amigo de Álex Lequio en Estados Unidos, para este papel, y también se habló de Nacho Ansorena. Pero finalmente ha sido Giaccomo Ugarelli , amigo de la infancia del hijo de Ana Obregón, quien se ha convertido en el padrino de la pequeña.

Los familiares y amigos invitados al bautizo de Ana Sandra

Al bautizo de Ana Sandra tampoco han faltado los hermanos de Ana Obregón. Si hay unas personas en las que la actriz se ha apoyado en los peores momentos, esos han sido ellos. Así que hoy han tenido el mejor día para celebrar después de años duros marcados por la muerte de sus padres y también de Aless Lequio.

Entre los amigos de Ana Obregón que no han querido perderse este día que la actriz ha preparado con tanto mimo, ha estado Susana Uribarri o Ra, por supuesto. La representante es una de las mejores amigas de la presentadora y no podía faltar en un día tan especial como el bautizo de Ana Sandra. Ra, por su parte, es apoyo y refugio de Ana Obregón, uno más en su familia. 

Tras la celebración del bautizo, Ana Obregón, Ana Sandra y los aproximadamente 30 invitados que han asistido al evento disfrutarán de una merienda en la casa de Ana Obregón. Se trata de una celebración familiar que la actriz ha preparado al detalle durante meses.

Ana Obregón, ante su primera Navidad con Ana Sandra

Ahora, Ana Obregón comienza su primera Navidad junto a Ana Sandra. La presentadora, después de tres años viviendo sus peores fiestas, ahora vuelve a recuperar la ilusión. La llegada de su nieta ha marcado un antes y un después en su vida y esta Navidad es el mejor momento para disfrutar de ella y para hacer balance de un año de 2023 que para la intérprete va a estar marcado por el nacimiento de la niña.

Además, también verá marcada la Navidad por el hecho de no dar las Campanadas. Este año ha dicho no a estar en la Puerta del Sol y dar la bienvenida al nuevo año desde La 1. Lo que quiere Ana es aprovechar al máximo el tiempo con su nieta y con esa máxima va a cumplir en estas fiestas.

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