Ana María Aldón, mucho más tranquila tras la operación de su madre: "Todo ha salido bien"

Hace apenas unos días, la propia Ana María Aldón reconocía a sus seguidores en redes sociales que no estaba pasando por un buen momento. La pandemia, sumado a las restricciones que de alguna manera le prohíben estar lejos de su familia, la tienen sumida en una profunda tristeza.

Este lunes, Ana María Aldón tenía cita en el juzgado de Plaza Castilla de Madrid con motivo del litigio que le enfrenta al diseñador Emilio Salinas. Sin embargo, era otra razón la que le rondaba la cabeza: el estado de salud de su madre, Celia, que lamentablemente tiene que ser intervenida quirúrgicamente del ojo, por tercera vez.

La mujer de Ortega Cano, muy preocupada por la delicada situación de su progenitora, anunciaba a la prensa que este mismo lunes tenía previsto viajar a Cádiz para estar junto a su madre en estos momentos: "Tengo que estar ahora a su lado. Me voy con ella", admitía. Pues bien, dicho y hecho. Después de varias horas de operación, Celia regresaba a casa con un apósito en el ojo y con la incondicional compañía de su hija pequeña.

Ana María Aldón junto a su madre, Celia

Esta misma mañana, la diseñadora se apresuraba a contar a través de redes sociales que, afortunadamente, todo había salido "fenomenal". Ahora es tiempo de descanso y recuperación. Ana María tiene previsto quedarse en la ciudad andaluza al menos hasta que su madre recupere la visión.

La mujer de José Ortega Cano es la pequeña de seis hermanos y está muy unida a su familia. Sus hermanos, tal y como relató en 'Supervivientes', lo han sido todo para ella tras una infancia bastante dura marcada por el maltrato de su padre a su madre, pero si algo agradece la diseñadora es que nunca la dejaron sola: "Me ayudaron con la niña y estuvieron todos mis hermanos a mi lado". Mientras Ana María se encuentre en Cádiz, Ortega Cano seguirá en Madrid al cargo del hijo que tienen en común.

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