María Jiménez ha fallecido a los 73 años. Tal y como ha informado “con tristeza y dolor” su familia mediante un comunicado remitido a Europa Press, el corazón de la cantante ha dejado de latir. Son muchos los que se quedan muy tristes con la pérdida de una de las mujeres más carismáticas del mundo de la música. En especial, su hijo Alejandro. María Jiménez tuvo una vida repleta de éxitos en lo profesional pero que no fue nada fácil en lo personal. Además, en los últimos años sufrió algún contratiempo de salud. Y si alguien estuvo siempre a su lado, ese fue él.
María Jiménez fue madre en solitario de Rocío, que en el año 1985 falleció en un fatídico accidente de tráfico. Este fue el golpe más duro de su vida, con el que aprendió a vivir pero del que nunca se recuperó. Su principal motor para superarlo, fue su hijo Alejandro. Fue en el año 1983 cuando María Jiménez y Pepe Sancho dieron la bienvenida a su único hijo en común. Desde entonces, María siempre tuvo a un fiel compañero de vida que se llegó a posicionar públicamente con ella tras el infierno que la artista vivió con el actor.
El apoyo público de Alejandro a su madre María Jiménez
Alejandro, el hijo de María Jiménez y Pepe Sancho, siempre se ha mantenido en un segundo plano. Pese a ser hijo de uno de los actores más conocidos y una de las cantantes más populares de nuestro país, él siempre ha preferido quedarse en la sombra. Pero hubo un momento en el que no dudó en sentarse en televisión y hablar del infierno vivido por su madre.
Fue hace poco tiempo. En enero de este mismo año, Alejandro Jiménez hizo una excepción y se sentó en el plató del ‘Deluxe’. Allí habló de la relación tóxica de sus padres. El hijo de María Jiménez y Pepe Sancho recordó que "eran dos caracteres muy complicados, dos trenes que chocan y es desagradable. Estaba todo el día apagando hogueras en casa”.
Además, Alejandro habló de cómo le contó a su madre que él había sido testigo de infidelidades de su padre Pepe Sancho. "Siento como que le he delatado, pero tienes que ser el tío más torpe del mundo para tener a una novieta y llevarla a la casa donde tu hijo puede llegar”, llegó a decir sobre cómo fue él quien le quitó la venda a su madre sobre su relación con Pepe Sancho. Y recordó como algo muy duro la separación del matrimonio. “La separación fue horrorosa, me frieron la cabeza. Yo estaba en medio”, dijo sobre uno de los peores momentos.
Desde que María Jiménez y Pepe Sancho se separaron, la relación entre Alejandro y su padre se enfrió. En el programa de Telecinco, aseguró que se enteró del fallecimiento de su padre por televisión. “Ahora no tengo sentimiento de odio hacia él por el rechazo que me hizo a mí personalmente, tendría ganas de ir y que me explicase por qué hizo eso en esa época. A veces tengo sueños en los que hablo con él y viene en son de paz, como que no ha muerto. Tengo un trauma”, dijo.
Como última reflexión, relató que después de tanto dolor, “pienso que lo más sano es dedicarte a tu familia que son tus hijos y tu mujer y atender a tu madre, si no es un desgaste”. Y es precisamente eso lo que hizo durante los últimos años de María Jiménez. Su hijo Alejandro le acompañó hasta el final.
En los últimos años, cada vez que la cantante sufría un contratiempo de salud, era él quien estaba a su lado y quien se encargaba de informar mediante comunicados de las últimas horas sobre la cantante. Ahora le toca dar el último adiós a su madre y recibir muchos mensajes de cariño por parte de todos los que le querían y siempre seguirán admirándola.