Es el peor momento de la vida de Alba Santana. El mundo se queda huérfano de la luz que desprendía Mila Ximénez, pero ella fue la única que conoció la faceta más desconocida e íntima de nuestra querida compañera: la de madre. Ese lado en que tanto mimo puso por mantener recogido del exterior, que tanto luchó y del que Alba Santana le demostró una y mil veces que podía estar orgullosa. Y así fue. Mila Ximénez ha fallecido a los 69 años a causa del cáncer de pulmón que anunció hace un año. A su lado, incansable, su hija Alba Santana ha sido un apoyo incondicional, pero también la razón por la que merecía seguir luchando hasta que las fuerzas dijeran basta. "Ha sido un orgullo ser su hija", confesaba con la voz quebrada el día después de su pérdida.
Poco después que sus tíos Manolo, Concha y Encarna, Alba Santana llegaba al tanatorio en el responso más íntimo que le dedicaba la familia a Mila Ximénez. "Hoy estoy con un poquito más de fuerza para daros las gracias por vuestra atención, por el respeto, por el cariño que habéis tenido siempre", en medio de la emoción se sonreía al recordar el lado más entrañable de su madre, "aunque a veces se enfadaba, sabéis lo mucho que os quería". "Yo me creo los buenos recuerdos de todo lo que me contaba de todos vosotros", concluía serena antes de entrar a darle el último adiós a su madre.
En los últimos días, de su enfermedad, Alba Santana no le ha soltado la mano a su madre. Han sido horas de angustia, de dolor, de sentir el abismo en las entrañas al imaginar la vida ya sin ella, pero también de sentir la oleada de amor que el mundo ha lanzado a su madre en su momento más duro. Desde que empezó su tratamiento contra el cáncer, Mila Ximénez ha recibido un aluvión de mensajes de cariño y fuerza que se intensificaron en los últimos días, cuando saltó la noticia de que su hija había volado desde Amsterdam debido a su estado grave de salud.
En el Tanatorio de la M-30, donde se instalaba la capilla ardiente el mismo día de su fallecimiento, su hija Alba ha querido agradecer el gran cariño que han recibido durante todo este tiempo tanto su madre, como ella y el resto de familiares que no se han separado de su lado hasta el doloroso desenlace. Los sentimientos se entremezclan con su triste pérdida tan reciente, pero el calor que les ha llegado les ha ayudado a no desfallecer cuando las fuerzas flaqueaban. Esta siendo el momento más difícil y duro de su vida, pero Alba no puede dejar también de sentirse abrumada y agradecida por lo mucho que les han acompañado durante este último tramo final los mensajes cálidos reconociendo a su madre. Puedes escuchar las primeras palabras de Alba Santana en el vídeo.