Aseguró que no se iba a casar en vaqueros como Cristina Pedroche. Lo ha cumplido y, además, nos ha dejado un lookazo divertido, original y favorecedor. El vestido de novia de Adriana Abenia ha estado compuesto por un por una falda de tul, una cazadora de cuero tipo ‘biker’ y un cuerpo brillante. Se ha dado el ‘sí, quiero’ en Zaragoza, su tierra, con su chico, Sergio Abad, que también ha dado una clase de elegancia a muchos novios.
El viernes por la mañana, en los juzgados de Zaragoza, la familia y amigos más íntimos de Abenia y Abad se reunían para contemplar la unión civil de esta pareja que prefería celebrar algo sencillo en su boda y huir de las celebraciones barrocas. Buscaban algo natural, porque ellos ya iban a aportar todo lo especial con el amor que se tienen, y por eso han escogido tener una rápida ceremonia en los juzgados y después festejar con sus seres queridos.
Abenia había desvelado algunas pistas, como que no iría de blanco. “No puedo ir de blanco, es una osadía” decía divertida, por lo que ha optado por este look que no puede ser más cañero y sirve como declaración de principios. “Se me ha ocurrido una boda muy loca que tiene que ver mucho conmigo, y aunque va a ser muy íntima voy a demostrar que estoy como un cencerro”, contó divertida a Europa Press hace escasos días.
También sabemos que en para la celebración Adriana y Sergio han puesto toda la carne en el asador y planeaban algo repleto de fantasía y locura. ¿A que no es ninguna sorpresa? Por supuesto que no.
Además, novia y novio han querido no practicar sexo en los días previos a la boda, para que cuando llegara la noche de bodas pudieran explotar de ganas y de placer.