Adara Molinero se abre como nunca sobre el distanciamiento con su hermano Aitor

A lo largo de los años Adara Molinero (31 años), ganadora de 'Gran Hermano VIP', ha tenido numerosos enfrentamientos tanto con compañeros de realities como con algunos miembros de su familia. Sobre todo con su padre, Jesús. Y aunque la exconcursante de 'Supervivientes' intenta no contar demasiados detalles, ha hecho una excepción para hablar de lo que le ocurrió hace unos años con su hermano Aitor, al que ha tenido cara a cara en el programa de la web de Telecinco 'En las mejores familias'. 

Junto a su madre, Elena Rodríguez (quien sin duda es también su mejor amiga y), Adara ha querido abrirse en canal sobre el distanciamiento que tuvo con Aitor. Un tema muy duro para ella con el que ha dejado a todos boquiabiertos. "Me siento culpable", comienza diciendo la colaboradora de Mediaset. Unas palabras que han provocado una gran incredulidad en el rostro de su hermano, quien ha aclarado también que entres "nunca ha pasado nada". 

Preocupada por el punto en el que está su relación, Elena Rodríguez pregunta a sus hijos sobre qué es lo que sienten. "No sé, dímelo tú", dice entre bromada Adara provocando las risas de los cuatro. "Pues bien", continúa Molinero poniendo un gesto algo resignado. "Pues hemos evolucionado. Cuando mucha gente me cuenta que se lleva muy mal con sus hermanos y me dicen 'cuando crezcas os llevaréis bien y tal' y en eso nunca crees. Pero es verdad que al final se da", dice Aitor, feliz de haber solucionado todo con ella. 

Elena, siempre con la prioridad de que su hijos estén bien, ha reconocido que que se lleven bien es algo que le importa mucho y que le pone muy alegre: "Es una felicidad veros juntos y veros compartir, ver ese respeto, que os queréis, veros reís como cuando erais niños que os reíais por los pasillos y jugabais", dice Rodríguez, que añade que Adara siempre fue más traviesa con su hermano pequeño. "Le pegabas mucho por los pasillos. Mucho bastante, la verdad", revela la madre de los dos. 

Ha sido entonces cuando Adara se ha querido justifica: "Bueno y luego nos pegábamos los dos". Pero Elena ha querido que se hiciera responsable de sus actos: "Sí, pero eras tú. Reconócelo. Eras tú", hace hincapié la matriarca. "Es que tú me decías que él era más bueno que yo", relata Molinero. "Porque lo era. Es que lo era", responde Rodríguez. "Es que lo debía ser", añade Pedro Solá muy enamorado. "Luego cambiaron los papeles", explica Aitor. 

"Luego se dieron la vuelta los papeles que no veas", reconoce Elena entre risas sobre el mal momento por el que pasó su hijo, que pasó de portarse muy bien a ser el más rebelde. En ese momento Adara ha querido explicar a todos cómo el paso del tiempo influye en las decisiones de cada uno y cómo gracias a madurar todo cambió: "¿Sabes qué pasa? Que hay cosas que cuando eres joven, o sea yo, no entendía. No sé si me estoy explicando". 

La familia Molinero habla de sus relaciones personales. 

"Lo que creo que quieres decir es que tenías una opinión sesgada de tu hermano y que te había faltado generar y crear tu propia opinión en base a tu relación con él", comenta Pedro para intentar entender a Adara, que no duda en contestar también. "Sí. Es que me gustaría aclarar algo porque nunca hemos hablado de esto, pero es que entre él y yo no ha pasado nada. No tuvimos ningún problema. Simplemente tú tuviste una adolescencia difícil a tu forma y yo tuve otra adolescencia complicada de otra. Yo no lo entendía y me distancié. Y me siento culpable", reconoce. 

"¿Ah sí? No pasa nada. No hay rencor de ningún tipo", responde Aitor, feliz de haber recuperado el amor y la relación con su hermana. "Sí porque yo tenía que haber sesgado contigo y haberme quedado a tu lado", contesta Adara. "Bueno, no te flageles ni te sientas culpable porque también el alejarse de las personas a veces una forma de autodefenderse", añade Solá, que se ha convertido en una figura muy importante para los dos. 

Adara y la mala relación con Jesús Molinero, su padre 

Adara y su padre habían tenido altibajos en su relación pero todo fue a peor cuando ella entró en 'Gran Hermano VIP 7'. Fue entonces cuando la vida de la exsuperviviente se cruzó Gianmarco Onestini y todo cambió por completo.