¡El día ha llegado! Con el corazón encogido, Adara Molinero ha tenido que hacer frente a una agria despedida. La ganadora de 'GH VIP 7' tiene que regresar a Palma de Mallorca y eso supone romper, al menos temporalmente, con todo lo que tiene en Madrid, entre ello la casa en la que vivió su apasionada, aunque breve, historia de amor con Gianmarco Onestini. 

Ha sido ella misma quien ha compartido con todos sus seguidores esta triste escena y es que uno de los mayores temores de la madrileña era volver a la vida que tenía en Palma de Mallorca, ahora más, que la relación con Hugo Sierra está completamente rota. Sin embargo y hasta que la expareja solucione los trámites de la custodia de su hijo Martín tiene que ser así.