Después de haber mirado y remirado el Instagram de Cristiano Ronaldo, solo he podido llegar a una conclusión: el futbolista es el bloguero de moda definitivo. Si cambias sus fotos jugando al fútbol por las frases inspiracionales/chistecillos de Paula Echevarría, nadie notaría la diferencia. ¡Cristiano ha equivocado su carrera!
Y traigo pruebas que argumentan el principio que aquí defiendo. Como por ejemplo, las poses. Esas posturitas y miradas que se marca desde una de sus terrazas o en el jardín de la casa (¿las fotos también se las sacará el jardinero?), unas poses hechas con toda la intención, sabiendo cuál es el mejor perfil y repitiendo las mismas hasta que salen pluscuanperfectas. Qué difícil es la vida de un bloguero, pero mucho más lo es la de su fotógrafo.
También, como buen blogger, le presta mucha atención al detalle. Los zapatos (o zapatillas), los gadgets tecnológicos, la gama cromática con la que va a crear el estilismo… una infinidad de factores que Ronaldo parece tener en cuenta a la hora de hacerse el más sencillo de los selfies. Pero es humano y, a veces, se equivoca. Como cuando tiene el guapo subido y piensa “no dejemos escapar este instante. Atesorémoslo para siempre con la cámara del teléfono”, y en la foto todo es perfecto: la luz, el pelo, la piel, el vestuario… salvo por las toallas que están tiradas en el suelo del baño. ¡Pero hombre! ¡Cómo no caes en ese detalle! ¡Con lo cuidadoso que eres tú siempre! Debió de poderle su ego y las ganas de compartir con todo el mundo su asombrosa belleza. Hay cosas que no pueden esperar, ¿verdad, Cristiano?
Y como buen bloguero, también toca otros palos diferentes a su especialidad, en este caso la moda. Un día puede ser blogger de belleza, y, al siguiente experto en entrenamientos y vida sana, para reinventarse del todo dentro de dos días con su faceta ‘foodie’, que es la versión ‘millennial’ de ser un gourmet.
La burbuja de los influencers puede que esté a punto de explotar, pero lo que es cierto es que Cristiano no parece haberse enterado. ¿Se abrirá un canal YouTube? Que tiemble El Rubius.