La relación entre Edmundo Arrocet (74 años) y las hermanas Campos sigue siendo tensa. La expareja de María Teresa Campos no ha tenido ningún tipo de problema en hablar de las hijas de la conocida presentadora pese a que estas nunca se han dirigido a él ni han aireado su relación. Aunque Terelu Campos (58 años) y Carmen Borrego (57 años) intentan mantenerse al margen y no dar ningún tipo de visibilidad a Arrocet, parece que la hija de este no piensa hacer lo mismo. Ayer mismo, Gabriela Arrocet se sentaba en el plató de ‘¡De Viernes!’ donde no tuvo ningún tipo de reparos a la hora de hablar sobre las conocidas periodistas. Esto ha provocado que Terelu Campos no pueda más ante la tensa situación y haya acabado cediendo en pleno directo.
Terelu responde a Gabriela Arrocet
Ha sido en pleno directo del programa de Televisión Española, 'D Corazón', en el que ella misma colabora, donde la hija de María Teresa Campos ha acabado explotando. "Si te están metiendo todo el día el dedo en la herida, no podemos pretender que esté amable y cariñoso". A pesar del mal trago, Terelu ha llegado a bromear con la posibilidad de tomarse unos días de "reflexión", emulando al presidente del Gobierno. "No puedo más, te prometo que no puedo más. No hay tregua", afirmaba, confesando lo difícil que se le estaba haciendo todo esto.
"Yo sé que hablo y que me siento en un programa de televisión, pero eso no justifica que no me quiten el pie del cuello". Respecto a las palabras que le dedicó en el programa de Telecinco la hija de Edmundo, Terelu lo tenía claro: "Hay personas que hablan de mí y no me han visto en su vida, con las que ni siquiera he tenido una conversación telefónica. ¿Cómo se comprueban las cosas ahora? Si yo no estoy y soy la otra protagonista. Yo no tengo medios para evitar que alguien diga lo que le dé la gana. Yo eso no lo puedo parar porque no tengo el poder", sentenciaba bastante compungida.
Gabriela Arrocet se dirige a Terelu y Carmen Borrego
Delante de los colaboradores del programa, Gabriela quiso dejar claro que la culpa de que la relación entre Edmundo y María Teresa acabase fue de las hijas de esta. Según afirmó anoche en el plató de Mediaset, las hermanas fueron las culpables de “que hubiera discusiones y a mi padre nunca le gustaron las discusiones. Hasta el día que dijo: 'Me voy y no voy a volver, quiero terminar la relación'. Con esta charla, la hija del humorista ha querido defender "el honor de mi padre porque mis dos hermanos no lo van a hacer". Además, también ha defendido su honor como artista, asegurando que este lleva muchísimos años trabajando como artista: "mi padre lleva 60 años de trayectoria artística. Ha triunfado en Chile, también en España. Los que han dicho que yo con mi papá no tengo relación están mal informados. Mi padre nunca se ha metido en mis decisiones", sentenciaba.
Pocos días antes, era Carmen Borrego quien rompía su silencio después de que el que fuese pareja de su madre decidiese empañar su legado y su memoria. Unas palabras de la colaboradora de televisión que poco después también suscribía su hermana Terelu.
Carmen Borrego, clara y tajante con Bigote y Gabriella Arrocet
"Siento mucha pena por él", aseguraba Carmen Borrego desde el plató de 'Vamos a ver'. "No solo no lo hizo bien en vida, sino que lo sigue haciendo mal cuando no está ella para defenderse y eso me causa mucho dolor". La hija de María Teresa Campos ha pasado días difíciles al comprobar como el que fuese compañero de vida de su madre sigue cargando contra su familia pese a que nadie se ha referido a él en ningún momento. Carmen incluso hacía una petición para que Arrocet se sentase en un plató de televisión, lo contase todo y ya terminase esta guerra que ha emprendido él solo.
En el mismo sentido se manifestaba Terelu Campos. "De este señor nunca he hablado, él se escuda en que nos contesta, desde luego a mí no me puede contestar porque yo no me he manifestado y no tengo nada más que añadir", apuntaba desde el plató de 'Dcorazón'. Siempre en un término prudente y elegante, la presentadora evitaba referirse a nada de lo que ha expresado el humorista. Una postura serena y correcta que ha vuelto a emplear después de que haya sido la hija del cómico la que haya decidido sentarse en un plató para contar una historia que aseguraba haber vivido.