La sorprendente decisión del jurado de ‘Bake Off': la poderosa razón por la que no ha habido expulsado

El jurado de 'Bake Off: famosos al horno' ha tomado una decisión que ha sorprendido a todos los participantes relacionada con el expulsado semanal

Sergio Rapado
Sergio Rapado

Periodista especializado en corazón y televisión

Bake Off
TVE

Una semana más los concursantes de ‘Bake Off: famosos al horno’ se encargan de ponerle las cosas muy difíciles al jurado. Quedan seis participantes, los cuales han demostrado sus dotes pasteleras y su evolución durante todas las semanas de concurso. Tanto ha sido así que el jurado ha sido incapaz de tomar una decisión con el expulsado de cada semana, por lo que todos continúan hasta la próxima entrega. Además, Blas Cantó se ha alzado con el famoso delantal que lo configura como el mejor repostero de la noche, obteniendo un beneficio de cara a la próxima prueba.

Polémica con la elección de equipos en ‘Bake Off: famosos al horno’

La primera prueba que han tenido que llevar a cabo los concursantes ha sido la de autor. En ella primero han tenido que separarse en dos grupos. Para ello, Alba Carrillo (37 años) era una de las capitanas, ya que la semana anterior había conseguido coronarse como la mejor. Por ello, ha elegido como otro capitán a Patxi Salinas porque lo veía más débil que al resto de sus compañeros. La colaboradora ha elegido a Ana Boyer y a Blas Cantó para su equipo, mientras que el futbolista se ha quedado con Pablo Puyol y Rocío Carrasco.

“Unir fuerzas es la única manera de conseguir algo tan precioso como esto”, advertía el jurado mientras mostraba lo que tenían que elaborar. “Una tarta de seis porciones, del mismo tamaño y de la misma altura”, realizada cada parte por un miembro del equipo, lo cual complicaba aún más las cosas. De hecho, ninguno de los dos equipos se ha caracterizado por realizar una buena prueba, tal y como ha confesado el propio jurado tras probar ambos postres.

Patxi Salinas triunfa en ‘Bake Off: famosos al horno’

Tras ello ha llegado la prueba técnica, aquella en la que tienen que replicar un postre. “Un viaje al pasado. Muchas veces conviene mirar al pasado para saber lo que tenemos en el presente. Vais a tener que hacer la receta que viene en este libro que es del siglo XVIII, con los materiales que había en esa época. A excepción del horno, no vais a poder usar ningún electrodoméstico”, comentaba el jurado antes de indicar que se trataba de una tarta de castañas que tendrían que flambear y realizar el merengue a mano.

Los concursantes se han decepcionado mucho al comprobar que no podrían disponer de las comodidades con las que cuentan en la actualidad. De hecho, el merengue es lo que más les ha costado a todos y ha sido el elemento diferenciador que ha destacado el propio jurado en la cata a ciegas. El mejor era Patxi Salinas que recibía la noticia con total sorpresa. Sin embargo, los jueces dejaban claro que todos estaban muy igualados y que no podían establecer un criterio para elegir las siguientes posiciones, a diferencia de lo que hacen otras semanas.

Sin expulsión en ‘Bake Off: famosos al horno’

Para la prueba fantasía ya le anunciaban que estaría relacionado con su pintor favorito, ya que tenían un atril cubierto con una sábana para que no supieran lo que tenían que recrear. Los seis participantes deberían realizar una tarta con tres bizcochos y dos rellenos diferentes, donde la decoración era complemente libre. Sin embargo, el jurado les pedía que jugasen con los colores y los animaban a divertirse mientras hacían su postre.

Tras llevar cada uno sus postres y el resultado de su tarta, el jurado se ha marchado a deliberar, teniendo claras sus dos decisiones. Por ello, han seleccionado a Ana Boyer y a Blas Cantó como los dos mejores de la noche, aunque finalmente el delantal de pastelero estrella ha sido para el cantante. Por otro lado, han determinado que sea el eurovisivo debido a su segunda y tercera prueba, ya que en la primera ha cometido algunos fallos.

El peor momento de la noche estaba por llegar. El jurado elegía a los concursantes que iban a batirse en duelo por la expulsión. Alba Carrillo o Patxi Salinas, los dos eran llamados para dedicarle unas palabras. Sin embargo, los jueces comentaban que estaban salvados ambos. Por tanto, la expulsión estaba entre Rocío Carrasco y Pablo Puyol. Tras unas palabras hacia cada uno, entonaban la famosa frase con la que se iba a determinar el expulsado. No obstante, ninguno de los participantes abandonaba los hornos, ya que habían conseguido ponérselo muy difícil y no podían elegir a ninguno para eliminarlo.