Un soltero deja atónita a su cita de ‘First dates’ al hablarle de su expareja: "Era un cura del Vaticano"

'First Dates' vuelve a abrir sus puertas a solteros que buscan el amor. Algunos de ellos esconden anécdotas tan peculiares como esta

Lorena López
Lorena López

Periodista especializada en corazón y televisión

First Dates
Mediaset España

Julio quiere encontrar pareja. Ha confiado esta, a veces, ardua tarea a 'First Dates'. En noviembre de 2015 sufrió un ictus. Desde entonces, su forma de ver la vida ha cambiado. "Me preocupo de lo que tiene solución. De lo que no, pues nada", confesaba a las cámaras de 'First Dates'. Solo ha tenido una pareja en su vida y ha pasado mucho tiempo, tres años, desde la última vez que intimó con alguien: "El cuerpo y la mente se te adaptan. Ahora me da pereza hacerlo". Puede que Roberto le haga cambiar de opinión. La primera impresión, al menos, fue buena. Las confesiones de la cita también dieron para mucho.

Julio aseguró que lo que más le llama la atención de un hombre es el culo y quiere que tenga "una mirada limpia". Su cita se presentó como un hombre "muy amado", del trasero no comentó nada y la chaqueta que llevaba impedía verlo. Roberto impresionó a Julio, tanto que este tuvo miedo de no estar a su altura.

Ambos pusieron de su parte para que la cita saliera bien. Julio no paró de hablar. Comentó que llevaba mucho tiempo viviendo en Zaragoza, aunque él nació en Madrid. Esa condición ha hecho que sea muy crítico con la ciudad en la que vive. "Creo que no es tan abierta como Madrid o Barcelona", comentó. Roberto es de un pueblo pequeño de Italia, de solo 1.800 personas, y asegura que él nunca se ha preocupado por eso. Ha vivido en Roma y ha viajado muchísimo. Julio, sin embargo, no ha viajado tanto como le hubiera gustado. "Más por España que fuera de ella. A la hora de la verdad o no encuentras personas con las que ir o el tiempo o el dinero", reflexiona. Que no haya viajado mucho llegó a Roberto a pensar que es muy hogareño y un poco miedoso a las novedades. Nada que no pueda solucionarse con un buen acompañante.

First Dates
Mediaset España

Julio y Roberto también hablaron de su vida amorosa. Una más activa que otra. Roberto se mudó desde Italia hasta Madrid por amor. Compartió diez años de su vida con un hombre del que lleva ya tres separado. "Soy de pareja estable", aseguró el italiano. Analizaron sus compatibilidades zodiacales. Julio es libra; Roberto, leo. "Se nota que soy leo, ¿no? Soy un poco presumido, creído, pero controlo", reconoció entre risas. Sin embargo, su cita no lo ha sentido así. "No le he visto en ese onda. No lo veo como yo entiendo 'creído'", reflexionó a cámara. Mientras admiraba el físico de su cita, confesó que no es de ir al gimnasio, pero sí es muy andarín. "Pongo el piloto automático. Ando en casa, estoy una hora y medio o dos andando", comentó.

Juntos jugando al Rasca del Amor. Entre los muchos retos, a los comensales de 'First Dates' les tocó hablar de lo que les enamora de una persona. Coincidieron en que cuando hay chispa, te gusta todo de la otra persona. "Te gusta su olor, lo que dice, las tonterías que hace...", comentó Roberto. "Si no hay química, es que es una persona que yo considero amiga", respondió Julio. Fue este comentario el que provocó que el italiano se lanzara a hablarle de una de sus relaciones pasadas, un algo más que amigo que tuvo en Roma. "Era cura", reconoció entre risas. "Allí, está lleno de curas gays. Él me gustaba mucho y en la cama perfecto, pero estaba casado con Dios", le contó. "Esto surgió en redes. Cuando nos vimos él me gustó bastante. Cuando me dijo que era cura, yo le dije que me daba igual, que yo vendía muebles. Para mí era algo normal. No lo veía ni con morbo ni nada", explicó a las cámaras de 'First Dates'.

La cita fue bien, o eso parecía hasta la decisión final. Roberto le dio un 'no' a Julio. "Porque no he notado química y es una persona muy interesante, pero que no entra en los estereotipos que yo busco", explicó. Julio aseguró que tampoco sintió esa atracción física que busca en una pareja: "Como persona, me lo he pasado muy bien". Habrá segunda cita, pero sin tintes amorosos.