Tomás (51 años) nunca ha tenido tiempo para el amor. El delegado comercial madrileño reparte su tiempo entre sus tres hijos y su afición al baloncesto como entrenador. Siempre ha priorizado estas dos cosas por encima de su bienestar sentimental. Las mujeres que han pasado por su vida le han rechazado por esto, pero quizá lo único que necesita en su vida es encontrar a la persona adecuada para hacerle hueco en su apretada agenda. Dispuesto a intentarlo, ha llegado a ‘First Dates’ con ganas de volver a ilusionarse.
"Estuve casado, llevo diez años divorciado y aquí estoy. Ha habido escarceos, bastantes. Uno cuando rompe la unidad familiar, cambias de la noche a la mañana. Me he enamorado, pero, por circunstancias, tengo muy poco tiempo. Siempre les he dicho desde el principio que tengo muy poco tiempo. Esto es lo que hay", le ha confesado a Carlos Sobera (64 años) nada más llegar al restaurante . El presentador le ha aconsejado que no sea tan sincero desde el principio.
Ha prometido que lo intentaría antes de conocer a Gloria (57 años). Como se ha podido apreciar en la cita, solo necesitaba encontrar a la persona adecuada. Y, a priori, parece que prejubilada de banca y estudiante de Filosofía de Valladolid le ha conquistado. Nada más conocerla ya le ha dicho que viajaría a su ciudad, encontrándole tiempo en su agenda.
A ella le ha encantado también. La química ha estado presente durante toda la cena. Aunque casi la cosa se tuerce por la política. Tomás le ha confesado su amor por España, plasmado en un tatuaje con una bandera del país en uno de sus brazos. Gloria se ha asustado mucho porque su abuelo fue arrestado por ser rojo. "Mi familia es muy roja. Mi abuelo fue perseguido por los militares, tuvo que huir a Francia y estuvo en la cárcel", confiesa ella a las cámaras de ‘First Dates’ antes de que el comercial la dejase a cuadros al contarle que uno de sus sueños era ser policía o militar.
Gloria asocia estas dos profesiones a ciertas ideas políticas. "Los militares no me gustan, pero bueno que todo el mundo tiene su defecto. Los militares suelen tener determinadas cosas como que le encantan como los toros, las banderitas…", ha dicho.
Menos mal que Tomás ha dicho que no le gustaban los toros y lo ha arregldo con Gloria. El comercial se ha mostrado de lo más encantado con la cita. Solo ha habido una cosa que no le ha gustado. Y es la pregunta que ha leído ella de la tarjetas de ‘First Dates’. "¿Dónde hay pelo, hay alegría?", ha preguntado Gloria con la cara de incrédulo de él, que no ha estado en absoluto de acuerdo con esta cuestión que planteaba el programa de citas de Cuatro. Así se lo ha hecho saber a Laura Boado, que le ha asegurado que ella no tenía nada que ver y que su padre también era calvo como él.
Después de bailar en el reservado, Gloria y Tomás han dicho sí a una segunda cita. La única condición que le ha impuesto la prejubilada de banca es que fuese a bailar salsa y bachata con ella. Sin dudarlo, Tomás ha dicho "sí".