La otra fuente de ingresos de Grison lejos del plató de 'La Revuelta'

Grison es uno de los colaboradores de 'La Revuelta' más queridos por el público gracias a su particular sentido del humor, pero su trabajo no solo está vinculado con la televisión

Lorena López
Lorena López

Periodista especializada en corazón y televisión

Grison
RTVE

‘La Revuelta’ no es solo David Broncano. Su éxito radica en una coctelera de ingredientes en el que uno de los principales tiene nombre propio: Marcos Martínez. Más conocido como Grison Beatbox, el de Soto del Real (Madrid) es una pieza fundamental en el engranaje del formato de Televisión Española. No es solo el "hombre orquesta" y el de los chistes sobre sustancias estupefacientes, es mucho más.

Atrás han quedado esos inicios en ‘La Resistencia’ en los que tenía nula experiencia en la pequeña pantalla. Llegó allí gracias a Ricardo Castella. Lo descubrió por casualidad en uno de sus shows de beatbox. Del mundo del espectáculo sí sabía bastante. Había participado en el musical Mayumana-Rumba y colaborado en el aclamado espectáculo The Voca People, con el que llegó a hacer giras internacionales.

Poco a poco se ha ido ganando el corazón de los telespectadores. Muestra de ello es que ha incrementado su número de seguidores en redes sociales. Solo por poner un ejemplo, en su cuenta en Instagram tiene más de 692.000 seguidores, 200.000 más que el pasado mes de septiembre. 

Tal es su fama en la actualidad que hasta hace sus propios bolos. Aunque lleva años recorriendo España con sus espectáculos es ahora cuando el colaborador de ‘La Revuelta’ agota todas las entradas. El pasado 10 de enero actuó en el Casino de Palma de Mallorca, donde daba a conocer su nuevo show. Se trata de una actuación, según la propia página que vendía las entradas para el evento, que mezcla "humor y música con versiones de míticas canciones, desde el soul y el funk hasta la música disco de nueva generación". Lo hace solo con la ayuda de su voz y de un aparato que graba y repite frases (loop station). Como colofón, un monólogo que sirve para generar un ambiente de diversión a los presentes. 

Cuenta además en su currículum con una portada en ‘Men's Health’. A sus 40 años, el colaborador de ‘La Revuelta’ mostró el pasado mes de enero el resultado del reto de la publicación, uno con el que se ha puesto (aún más) en forma durante dos meses.

"Yo no me he visto así en la vida. ¿Así como estoy ahora? ¡En la puta vida! Si yo con 20 años, tío, estaba ahí comiendo palmeras de chocolate, jugando al Pro Evolution… Creo que llevaba a lo mejor 15 años sin estar por debajo de los 80 kilos. Empecé el reto con 87 y ayer me pesé y estaba en 77. Así que diez kilitos me he quitado con la tontería. Estoy en mi peak", decía a la revista en la entrevista que compaginaba con el reportaje de su renovada imagen.

Posando con el pecho al descubierto, Grison dejaba atónitos a los españoles luciendo un cuerpo de infarto. Lo ha conseguido gracias a someterse a los consejos del director técnico y experto en fitness, Aarón Santos, y del nutricionista clínico y deportivo en alto rendimiento Roberto Oliver. Está irreconocible si se le compara con las imágenes que se emitieron hace once años cuando debutó en la pequeña pantalla. Todo comenzó porque sufría mucho estrés y eso le llevó a padecer ansiedad. Para paliar estas consecuencias, Marcos Martínez decidió aceptar el reto.

Grison El Hormiguero
Atresmedia

Quien seguro que se quedó encantada con el cambio, además del protagonista, es su mujer. Rara vez comparte algo que tenga que ver con su vida personal, aunque se sabe que está casado y es padre de dos hijos. Sí es cierto que es habitual que haga referencia a sus vivencias con ellos en sus esperadas intervenciones pero nunca sobrepasa los límites de su intimidad. Es su máxima.

Los primeros trabajos de Grison

Mucho ha cambiado su vida desde que Marcos Martínez empezó a ser conocido como Grison después de que un primo suyo le bautizase así en referencia al personaje Gil Grissom, uno de los protagonistas de la famosa serie ‘CSI: Las Vegas’.

Se inició en el mundo laboral como socorrista y churrero. De hecho, en varias entrevistas relató con mucho salero cómo su vida de juventud era incompatible con ese trabajo en el que comenzaba sus turnos a las tres y media de la madrugada. "Trabajaba de empalmada. No llegaba a la churrería desde la cama, sino desde la fiesta", contó. Un día incluso llegó a confundir una pastilla de jabón de sosa con una patata. Fue su padre quien le advirtió de lo que estaba haciendo.