Mario Vaquerizo afronta otro reto en 'El Desafío': se sincera sobre la enfermedad que padece

Mario Vaquerizo hace frente a un reto musical, el más completo para él de 'El Desafío', pero antes ya habló de la enfermedad que sufre

Lorena López
Lorena López

Periodista especializada en corazón y televisión

El Desafío
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Mario Vaquerizo (49 años) se ha convertido en una pieza fundamental de 'El Desafío'. Cada viernes enfrenta todo tipo de retos, algunos con mayor fortuna que otros. No acostumbra a recibir las máximas puntuaciones, pero sí que se ha ganado el cariño de compañeros, jurado y público. Interviene cuando le apetece y reparte justicia siempre que lo cree necesario. El cantante no tiene reparo en recalcar el esfuerzo de sus compañeros y poner en valor algo cuando cree que es oportuno. 

Sus apuntes son los más esperados por el público y puede que también por sus compañeros, a quienes anima constantemente. Su optimismo y buen humor son contagiosos y eso que su cuerpo no siempre le acompaña, como le ocurrió la semana pasada. 

Mario Vaquerizo ha protagonizado números musicales. El último este mismo viernes. "Es el desafío más desafío al que me he enfrentado desde que estoy aquí. He tenido que aprender a tocar la guitarra, algo en lo que yo no tenía ningún interés", ha dicho, siendo interrumpido por una carcajada de Roberto Leal. "Luego tengo que tocar una mandolina, ¡qué diga! una melodica y una arpita de mujer. Todo esto para tocar la banda sonora de una película de la historia, 'La muerte tenía un precio'", ha explicado. También tiene que silbar. 

"Yo no voy a llorar. Sabéis que yo, jurado, nunca he llorado, pero si vosotros y todos los espectadores supiérais... Les tenía mareados. Silbaba y silbaba, pero los nervios me bloquean. No van a poder con el Vaquero Vaquerizo. Lo bien acompañado que voy a estar acompañado hoy", ha dicho antes de enfrentarse al desafío, recibiendo una fuerte ovación de sus compañeros. "Esto es dificilísimo", le ha dicho Chenoa, poniendo en valor el esfuerzo. "¡Vamos, Mario!", le ha dicho Pepe Navarro. 

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Mario Vaquerizo también ha tenido que hacer frente a pruebas de fuerza. En la gala anterior tuvo que arrastrar un escenario que pesaba casi dos toneladas: estructura, equipo y las mismísimas Nancys Rubias. Lo hizo con sus botas de la suerte. Pese a las dificultades, el marido de Alaska consiguió llevar a cabo el reto propuesto por la dirección del programa, no sin un gran esfuerzo por su parte. 

Mario Vaquerizo ya avisaba antes de que la prueba se llevase a cabo de que se iba a realizar de una manera diferente a la habitual. ¿La razón? La enfermedad que padece. “Yo tengo un problema de artrosis degenerativa en el hombro e intentar forzar el hombro... Me facilitaba más si me ponía el corsé, pero hacía fuerza y ya era lo que me faltaba”, explicó el líder de las Nancys Rubias. Por eso, en lugar de tirar con los hombros, el peso se lo cargó en la cadera.

Una afección que sufre desde hace años

No es la primera vez que Mario Vaquerizo habla de su enfermedad. En 2018 hizo público que padecía artrosis crónica. Con tan solo 45 años, su vida dejó de ser la misma. Una tarea tan común como secarse el pelo entrañaba dificultad para el cantante. Tuvo que lidiar con ello y poco a poco fue aprendiendo hasta dónde podía llegar y hasta donde no. Dos años después de su confesión, reconocía a ‘Lecturas’ en exclusiva que no era fácil: “Sigo con mi fisio, tengo que seguir cuidándome y haciendo ejercicios de hombro porque tengo una parte cogida. Algunos días tengo unos pinzamientos horrorosos”. 

Durante este tiempo, ha tenido que lidiar con muchos dolores y a aprender a convivir con ellos. En repetidas ocasiones, Alaska ha reconocido que fue muy difícil para él. “Se vino abajo y lo entiendo. Una persona joven, que nunca ha tenido ningún achaque y, de repente, se ve imposibilitado”, dijo a Lecturas. 

Alaska, su gran apoyo sentimental y profesional

Dificultades mediante, Alaska siempre ha tratado de apoyarle. En lo bueno y en lo malo. Llevan muchos años juntos. Se conocieron en 1999 cuando ficharon a Mario Vaquerizo en la discográfica de Alaska. Fue amor a primera vista. “Convives mucho, te vas a hacer las giras de promoción, a las firmas de discos, luego te vas al hotel a cenar… y te vas dando cuenta de que hay una persona que es tu jefa que te gusta”, confesó el cantante a Toñi Moreno en 'Gente maravillosa', su programa en Canal Sur.

Seis meses después se casaron en Las Vegas tras una pedida atípica en un ‘after’ después de una larga noche de fiesta. Él, vestido de Elvis Preysler; ella, de Dolly Parton. Todo aderezado con alguna que otra copa de más. “Antes de darnos el 'sí, quiero' en la wedding chapel, nos bajamos al bar a tomar unos margaritas helados... Los bebimos tan rápido que nos casamos con dolor de cabeza y todo”, recordó la pareja en una entrevista con Bertín Osborne. No se lo contaron a nadie en ese momento, ni siquiera a sus padres. 

Oficializaron su unión en España con una boda civil en 2011. La celebraron en Madrid y fue grabada por el reality show que por aquel entonces protagonizaban para MTV. Desde entonces han sido y son muy felices juntos. Esto no quiere decir que no haya momentos para todo. La pareja ha reconocido en multitud de ocasiones que las peleas entre ellos son diarias.

El día que Alaska rompió con Mario Vaquerizo

Algunas de sus peleas han sido más grandes de lo habitual. Una de ellas, con motivo de una noche de fiesta de Vaquerizo en el año 2000, provocó que Alaska decidiera romper con él. Finalmene, la cantante recapacitó y solucionaron los problemas. La otra gran crisis del matrimonio fue tras la muerte del hermano de Vaquerizo en el año 2004. El cantante ha confesado no ser el mismo desde entonces y esto les distanció como pareja. Quitando estos puntuales altibajos, el amor y el entendimiento siempre ha prevalecido en sus discusiones. Se han consolidado como una de las parejas más estables del panorama nacional.

El mayor punto de discrepancia entre Alaska y Mario han sido los hijos. Él sí que hubiera querido tenerlos, pero Olvido se negó. "Con 31 años me preguntó si quiero ser madre, tuve un cuestionamiento profundo y decidí definitivamente que no. Hasta ahora la pregunta siempre era: '��no vas a tener niños?'. Como si fuera una obligación. No quiero tener hijos y punto", confesó ella en la citada entrevista con Bertín Osborne.