No es nada fácil que en una cita a ciegas funcione todo a la maravilla, pero la experiencia de Pedro (30 años) no ha podido ser mejor. El lotero madrileño y exjugador de fútbol profesional ha llegado a ‘First Dates’ dispuesto a encontrar a alguien con la que formar una familia después de tres parejas infructuosas. "La verdad que no me ha ido muy bien, pero aquí estoy. A ver si hay suerte. A buscar a alguien que merezca la pena y que seamos felices", ha dicho detrás de cámaras antes de confesar que su mujer ideal es la camarera Laura Boado (25 años).
"Mi prototipo es Laura. Es una chica guapa, con estilo y tiene un buen cuerpo. Y encima es vergonzosa, que eso me gusta un poquito", ha añadido mientras que la camarera y presentadora de 'First Dates' se ha colocado cerca de él para que la viese bien, haciendo una broma.
Ese ‘enamoramiento’ se le ha pasado en cuanto ha conocido a Alejandra (27 años), que trabaja en Marketing. Hasta Carlos Sobera (63 años) ha señalado que hacen buena pareja. A Pedro le ha parecido muy mona, mientras que Alejandra ha confesado que es un chico muy guapo de cara: "Es bonito. Tiene unos ojos muy bonitos". Tras las presentaciones, ya ha habido muestras de buen feeling después de que ella le dijese que tiene raíces cubanas pero que no había ido jamás a Cuba. Momento que ha aprovechado el presentador de ‘First Dates’ para animar al exjugador de fútbol a que comprase unos billetes de avión: "Saca un par de billetes, enséñale su casa y ya verás como te ganas su corazón".
Ambos odian las mentiras y valoran por encima de todo la honestidad. Hasta serían capaces de perdonar una infidelidad. Coinciden en su pasión por viajar y en el hecho de que quieren formar una familia en el futuro con alguien que merezca la pena. "Me encantaría irme a vivir con esa persona y, cuando pase el tiempo, me gustaría tener una familia", le ha confesado Pedro a su cita en ‘First Dates’. Lo mejor de todo es que se han reído bastante.
Después de darse un beso loco en el reservado de 'First Dates', ambos han dicho ‘sí’ a una segunda cita. "Creo que al final algo nos ha encontrado aquí, la ocasión lo merece y conocernos un poquito más, estaría bien", se ha sincerado ella. "He estado muy a gusto. Para mí lo importante es sonreír y lo he hecho contigo y tenemos cosas en común, que eso es importante", ha dicho Pedro después. Así que, con la promesa de ir a Cuba juntos, han salido del restaurante de lo más felices y de la mano, dispuestos a ir a por un mojito.