Ilia Topuria vuelve a 'El Hormiguero': de la casualidad que cambió su vida a su historia de amor con Georgina Uzcategui

No hace ni dos meses que Ilia Topuria (27 años) estuvo en 'El Hormiguero' para promocionar la película de su vida 'Topuria: Matador'. Este jueves regresa al plató de Pablo Motos (59 años) por tercera vez en lo que va de año. Lo hace para hablar de la pelea con Max Holloway en la que rivalidó su título de Campeón de Peso Pluma de la UFC el pasado 26 de octubre. El hispano-georgiano está haciendo historia y ha conseguido que hasta el propio Carlos Alcaraz se inspire en él. No es de extrañar teniendo en cuenta que es un auténtico luchador que ha tenido que sacrificar muchas cosas de su vida para llegar a dónde está. 

'El Matador', como así se le conoce por la pasmosa rapidez con la que suele terminar sus combates, no tuvo la mejor de las infancias. Durante un tiempo tuvo que vivir separado de sus padres. Apenas tenía ocho años cuando sus progenitores se tuvieron que mudar a España, dejando en Georgia a él y su hermano,  Aleksandre Topuria. "Fue muy duro. Intentaba entender por qué nos tuvieron que dejar, aunque hoy en día lo agradezca", reconoció en una de sus visitas pasadas a ‘El Hormiguero'. Aquello forjó su carácter.

Poco después empezó la guerra y siendo solo un niño vivió cosas inimaginables. "Todo el mundo estaba en la desgracia. Sin agua ni comida. Estábamos en el sótano viviendo para que no tiraran bombas. Allí está el verdadero miedo y no en el octógono. En cualquier momento te podían matar. Entraban en tus casas y te podían torturar", contaba.

La casualidad que cambió la vida de Ilia Topuria

Con 15 años, su hermano y él se pudieron trasladar por fin a Alicante con el resto de la familia. Fue en ese momento cuando comenzó su idilio con las artes marciales. Una de esas casualidades que te cambian la vida por completo. Iban caminando por las calles de Alicante en 2012 cuando se encontraron a un hombre que les llamó la atención por tener las orejas de coliflor, una de las lesiones típicas por practicar deportes de contacto. Su madre le preguntó y les recomendó entrenar en el Climent Club, que, a día de hoy, aún regentan. Los hermanos Climent, Jorge y Agustín, son, en buena medida, culpables de su éxito ya que le enseñaron todo lo que saben de lucha.

Topuria empezó en las competiciones con la mayoría de edad recién cumplida, pero la fecha clave de su carrera deportiva fue a finales de 2020, cuando debutó en la UFC contra Yossuef Zalal. Su gran primera victoria. Ya entonces prometía y se preparaba a conciencia, como lo hace ahora. El cinturón negro en jiu-jitsu ha vencido en estos años, durante su meteórica trayectoria profesional, a nombres mayúsculos del mundillo como Francisco Javier Asprilla, Kalil Martin, Daniel Vasquez, Jhon Guarin, Mika Hamalainen, Brian Bouland, Luis Gomez, Steven Goncalves, Youssef Zalal, Damon Jackson, Ryan Hall y Jai Herbert.

Alicante, la ciudad que le enamoró

Alicante fue la ciudad que pisó cuando vino a España por primera vez y es en la que se siente más a gusto. Aunque es de Georgia, Topuria siempre ha lucido las dos banderas con orgullo. De hecho, no hace mucho que consiguió el DNI español. Fue después de hacerle una petición a Pedro Sánchez en una reunión cuando le concedieron este honor de pertenecer a un país que considera su casa.

"Yo me siento súper español, también me siento georgiano. Es como tener dos hijos. Cuando me preguntan, '¿Georgia o España?'. No puedes elegir entre dos hijos, a los dos los quieres por igual. No se puede. Yo tengo un amor inmenso hacia los dos países y cualquiera que diga cualquier cosa acerca de esas dos banderas, por lo menos delante de mí, pagará por sus palabras y por sus hechos", decía en una entrevista.

Su historia de amor con Giorgina Uzcategui

En esta ciudad reside junto a su hijo Hugo y su pareja, la empresaria Giorgina Uzcategui. La joven venezolana, licenciada en Administración y Dirección de Empresas en Miami y propietaria de la empresa de soluciones sostenibles Future & Energy, es la que le ha acompañado en sus grandes victorias en la UFC. Se conocieron durante una cena y desde entonces no se han separado. "Es uno de los mejores regalos que me trajo Dios", dijo él. A finales de julio, la feliz pareja dio la bienvenida a su primera hija en común, que lleva el mismo nombre que su madre.

Con Giorgina Uzcategui comparten su pasión por la moda y el lujo. De hecho, una de las grandes perdiciones de Topuria son los relojes de gama alta. En su última aparición en ‘El Hormiguero’ apostó por un Patek Philippe Nautilus que se estima en 100.000 euros.

Topuria es un hombre muy familiar, y el tiempo que no está luchando o entrenado, está con los suyos. Lo que le queda lo dedica a explotar su imagen o en proyectos como el de OnlyFans, la plataforma de contenido para adultos. Recientemente se anunció su fichaje pero, como él mismo comentó, no habrá vídeos subidos de tono, sino que publicará entrenamientos y contenido fuera de cámaras. "Voy a empezar a subir contenido exclusivo relacionado con MMA/UFC", explicó.