Fue en 2004 cuando Beatriz González entró en nuestras vidas como concursante de 'Gran Hermano 6'. Pronto se ganó el apodo de 'La Legionaria' por su profesión, a la que accedió por una promesa a su abuelo. "Entré a la Legión por mi abuelo. Él fue legionario y él me contó las cosas que hacían", ha dicho Bea a 'LOC'. No fue fácil. Tenía 18 años cuando entró en el Centro Militar de Formación, después de pasar por un coma durante 15 días por un grave accidente de moto, y su carácter ya era fuerte. Tanto que le cayeron castigos durante su formación. "Estuve 80 días de arresto antes de jurar bandera [...] Rompí todos los esquemas", ha dicho al citado medio, muy orgullosa.
No obstante, de manera inesperada, se cruzó en su camino el reality más famoso de la televisión. Se encontraba en una excedencia para estudiar para las oposiciones de la Guardia Civil cuando decidió participar en 'Gran Hermano'. Bea no sabía de que iba el programa, pero decidió rellenar el formulario mientras pasaba un rato con su novio. El resto es historia. Después de pasar el casting en persona, la joven entraba en la Casa de Guadalix de la Sierra y se convertía en una de las concursantes más polémicas.
Ahora vive en Getafe y sigue reivindicando su amor por España. De hecho, en muchos de sus looks incluye la bandera oficial del país. También ha continuado luchando contra lo que ella considera injusto, sin importarle las consecuencias. Por ejemplo, si ve que alguien no recoge los restos que ha defecado su perro, se enfurece. "¡Que tu perro ha cagao! Pedazo de guarro", les suele gritar.
Bea 'La Legionaria' deja en shock con sus palabras sobre su hijo, Adrián
Aunque su entrevista deja frases sorprendentes sobre su situación actual, ha habido una declaración que ha sorprendido mucho. Se trata de sus palabras sobre su hijo, Adrián. Desde que dejó las Fuerzas Armadas para entrar en 'Gran Hermano', Bea ha reconocido sentirse desubicada. "No puedo hablar de esto, no sé, me pongo mal... Desde que me fui de allí me siento como pez fuera del agua. Nadie me entiende, nadie comparte mis valores", ha admitido al mencionado diario. A pesar de esto, ha seguido adelante con su vida con la fuerza e irreverencia que la caracterizan.
Actualmente no hay nada que le de miedo, ni siquiera a muerte. Bueno, excepto la de su hijo, Adrián. Bea se enternece al hablar del joven: "Es lo más bonito que tengo". 'La Legionaria' ha contado una anécdota sobre como cuando estaba a punto de dar a luz, quiso que su pequeño naciera el 12 de octubre, Día de la Hispanidad. "Quería que naciera el 12 y estuve toda la noche dando saltos, a ver si provocaba el parto... Nació el 13. Hasta en eso me llevó la contraria", ha bromeado. Una actualización de la que fue una de las concursantes más famosas y recordadas de 'Gran Hermano'.