Ha ocurrido tantas veces que dejó de sorprendernos: series españolas que pasaban con datos modestos, o directamente malos, por su emisión en la televisión tradicional para después convertirse en bombazos internacionales en el streaming. ‘La casa de papel’ es el ejemplo por antonomasia: se estrenó con audiencias decentes en Antena 3 para ir perdiendo fuelle conforme pasaban las semanas. Después llegó a Netflix y el resto es historia: sus últimas temporadas están entre las 10 series de habla no inglesa más vistas de la historia de la plataforma, así como su recién estrenado spin-off, ‘Berlín’.
Pero hay más títulos que vivieron el mismo destino, si no de forma tan espectacular: ‘Vis a vis’, ‘Toy Boy’, ‘La valla’, ‘El ministerio del tiempo’… Y se acaba de volver a repetir con ‘Entrevías’: su tercera temporada, que tuvo datos de audiencia muy mejorables en su emisión en Telecinco en otoño, ha vuelto a entrar en el ranking de lo más visto en Netflix. Desde su estreno en la plataforma el pasado 23 de febrero, esta nueva tanda de la serie protagonizada por Jose Coronado ha acumulado 4 millones de visualizaciones según los datos de Netflix, convirtiéndose en lo más visto de habla no inglesa durante semanas y entrando en el top 10 de Netflix en 45 países.
Que la ficción española interesa al público, dentro y fuera de nuestras fronteras, está fuera de toda duda. ¿Por qué le cuesta tanto a la televisión tradicional aprovecharse de ella? En el caso de ‘Entrevías’ se ven claramente algunas razones.
La lección que deja 'Entrevías'
La serie producida por la Alea Media de Aitor Gabilondo (‘Vivir sin permiso’) tuvo una primera etapa de excelentes resultados en su emisión en abierto: en 2022 se convirtió en una de las series más vistas en años tras su paso por Telecinco. La cadena de Mediaset vio el filón tan claro que incluso adelantó la emisión de la segunda temporada y la enlazó con la primera. ‘Entrevías’ se despidió con una media de 1,8 millones de espectadores y un 16,4% de cuota de pantalla.
La tercera temporada, sin embargo, fue otro cuento. Los ocho episodios emitidos entre octubre y noviembre de 2023 rara vez pasaron de los dos dígitos de cuota de pantalla. En números totales, perdió casi la mitad de espectadores, pues la mayoría de episodios no llegaron al millón. ¿Qué pasó entre las dos primeras temporadas y la tercera? Entre otras cosas, el maltrato y menosprecio sistémico que las cadenas españolas demuestran por la ficción que ellas mismas producen.
La tercera temporada de ‘Entrevías’ se emitió sin la suficiente promoción, una asignatura en la que Telecinco siempre ha sobresalido hasta el punto de excederse, y a la que debe gran parte de sus éxitos cinematográficos. Pero quienes sí se enteraron de que se emitía se encontraban con otros obstáculos, como la hora de emisión (el problema del prime time en España sigue siendo urgente) o el abuso de los cortes de publicidad. ‘Entrevías’ llegaba a empezar su emisión casi a las 11 de la noche y después la cadena introducía casi media hora de publicidad a lo largo de sus 75 minutos, por supuesto sin tener en cuenta el ritmo y los puntos de giro del capítulo. Una tortura para cualquier espectador, por muy interesado que esté en la serie.
Telecinco, que se encuentra en una grave crisis de audiencia y reputación, hizo caso omiso al hecho de que la tercera entrega de ‘Entrevías’, incluso con su flojo estreno (11,2% de cuota de pantalla, 1,04 millones de espectadores) había superado la media de la cadena. En vez de aprovechar el interés en la serie tras su paso por el streaming y anunciar a bombo y platillo la esperada continuación, la fue programando después de ‘GH VIP’, a horarios intempestivos y con cortes abusivos.
No es de extrañar que gran parte del público decidiera esperar a su estreno en Netflix, donde podrían verla en el horario que le placiera y sin cortes. ¿Puede competir la televisión tradicional con eso? Puede (y debe) intentarlo, y solo hay un camino posible: respetar a la audiencia. Ofrecer la emisión en horarios más accesibles, introducir cortes publicitarios con duraciones soportables y programarlas con cariño (que la tercera de ‘Entrevías’ tuviera que competir con ‘Hermanos’, el fenómeno turco de Antena 3, tampoco ayudó).
Tampoco es el camino recurrir a estrategias sin sentido, como guardarse las series exitosas en un cajón hasta que sean necesarias como contraprogramación, algo que hace incluso la televisión pública: RTVE ha sido criticada en infinidad de ocasiones por su maltrato a títulos como ‘El ministerio del tiempo’, ‘4 estrellas’, ‘La promesa’, ‘Fuerza de paz’, ‘Sequía’…
Antena 3 es la excepción en este sentido, como ha demostrado en las últimas semanas con el exitoso estreno de ‘Sueños de libertad’. La nueva serie diaria venía con el difícil reto de sustituir a ‘Amar en tiempos revueltos’, y Antena 3 ha aplicado una fructuosa estrategia estrenando el primer episodio en prime time, dándole la cantidad de promoción adecuada e incluso eliminando cortes de publicidad para enganchar más efectivamente al público. Por su parte, Telecinco sigue desperdiciando series con potencial comercial, como ha hecho en el pasado con ‘Señoras del (h)AMPA’, ‘Madres. Amor y vida’ o las últimas temporadas de ‘La que se avecina’, que se estrenaron en Prime Video mucho antes que en la parrilla de la cadena de Mediaset. ¿Ha dejado de creer en la ficción, esa que tantas alegrías le dio en el pasado?
La cuarta temporada de ‘Entrevías’ será la última
Creada por David Bermejo y dirigida por Iñaki Mercero, ‘Entrevías’ está protagonizada por Tirso Abantos (Coronado), un exmilitar que pasa sus días regentando su ferretería en un barrio obrero de Madrid. Su relación con su nieta Irene (Nona Sobo) le llevará a involucrarse en las guerras callejeras del barrio, un violento ecosistema que convierte la serie en una apuesta local con una mezcla de géneros explosiva. Además ha sido laureada por su retrato de los barrios de extrarradio y la representación de la diversidad social que se encuentra en la España actual, aunque también recibió críticas por estigmatizarlos mostrando una visión demasiado dramatizada de ellos.
La cuarta temporada, que se terminó de grabar en enero, será la última. Mientras esperamos que Telecinco anuncie el estreno (que podría llegar tras el verano), ya se han publicado algunas imágenes del rodaje, como este momento en el que Coronado y Luis Zahera (que interpreta al inspector Ezequiel) se despedían del equipo.