Raphael (81 años) es uno de los artistas más icónicos de la música española. Cualquier excusa es buena para contar con el cantante. El jiennense acude a 'El Hormiguero' para compartir detalles sobre su impresionante carrera y sus próximos retos profesionales. Cuenta con una trayectoria que abarca más de seis décadas. En ese tiempo, ha salido reinventarse y conquistar a distintas generaciones. Su último trabajo ha sido 'Ayer...Aún', un disco en el que muestra su admiración y agradecimiento por la canción francesa que tanto admira y que ha marcado parte de su carrera.
En cada una de las 13 canciones, el artista homenajea a grandes artistas como Gilbert Bécaud, Charles Aznavour, Jacques Brel, y su querida Édith Piaf. De hecho, con esta última, se une en una grabación única en el que interpretan a dúo su inolvidable 'Je ne regrette rien'.
Pablo Motos (59 años) y sus hormigas han aprovechado esta visita para entender la profundidad de este nuevo disco y recordar los momentos más memorables de su vida artística, revelar anécdotas inéditas y adelantar información sobre sus esperadas actuaciones. Ha sido durante esta entrevista cuando el presentador ha querido saber cuáles han sido los conciertos que más han marcado a Raphael.
"Elvis Presley en Las Vegas, Barbara Streisand, Lisa Minelli, ABBA...", ha enumerado. Sin embargo, uno de ellos le impacto para mal. Una dura crítica que no ha tenido reparo en compartir con Pablo y el público del programa. "Con Elvis... Yo lo que vi, no lo hubiera hecho nunca. Lo voy a dejar ahí", ha afirmado.
Motos, queriendo saber más detalles, ha conseguido que el cantante argumentara un poco más su respuesta. "Elvis no estaba en condiciones de hacer... Es una pena porque lo había conseguido todo. Era lo más. No había nadie más que él", ha dicho, con cierta pena. Ha acabado esta intervención con un deseo: "Ojalá yo no tenga que pasar por eso".
La peculiar (y secreta) boda de Raphael y Natalia Figueroa
A su lado siempre ha estado Natalia Figueroa. Se dieron el 'sí, quiero' en 1972. Sorprendieron a muchos al contraer matrimonio en secreto. "Hará apenas un mes que Natalia me había escrito: Me caso con Raphael. Quiero que seas mi testigo. Pero para evitar un jolgorio tendremos en secreto absoluto la fecha y el sitio", relataba en ABC José María Pemán. "Lo cumplieron fielmente: y empezó una especie de película policíaca, con las fintas y estrategias más enrevesadas para despistar agencias y fotógrafos. Pero hace unos pocos días, Natalia al teléfono: Eso es el día 14. ¿El sitio? Ya lo sabrás. Como tengas intervenido el teléfono pensarán que proyectamos el asalto de una joyería".
Se casaron rodeados de discreción y romanticismo. Pese a sus muchos esfuerzos, no consiguieron evitar que hubiera prensa en su boda. Finalmente, posaron resignados para los que habían conseguido llegar a la iglesia de San Zacarías, en Venecia. Fue solo el inicio de un matrimonio que perdura a día de hoy. Pese a los muchos focos que ha acaparado Raphael, Natalia siempre ha intentado mantenerse al margen. Ha sido el apoyo silencioso e incondicional detrás del artista.
Raphael y Natalia han formado una familia sólida. Tienen tres hijos: Manuel, Alejandra y Jacobo. Eso sí, siempre manteniéndose alejados de los focos. Han hecho malabarismos entre su personaje público y su vida privada. Estos esfuerzos han preservado la intimidad de su matrimonio y de su familia, permitiendo que su vínculo no haya sido expuesto a los reflectores mediáticos.
El patrimonio de Raphael tras una larga trayectoria como cantante
Raphael sigue dejando sin palabras a muchos al seguir subiéndose a los escenarios con 81 años. El cantante podría haberse retirado ya de la música y disfrutar de los muchos éxitos que ha cosechado a lo largo de su carrera, pero él tiene otros planes. Sigue actuando por diversión y pasión por su profesión.
"Estoy bastante conforme con lo que ha sido mi carrera, mi trabajo y mi vida en esto, pero no me puedo descuidar. Llegaré hasta cuando y donde Dios me deje, siempre que sea en perfecta condición. No me gustaría llegar al final como un desecho de mí mismo", dijo el cantante en una entrevista en 'La Razón'.
Pese a lo que uno se pueda imaginar, Raphael no ha hecho abultadas inversiones inmobiliarias o ha conformado en grandes empresas. Según publicó 'Vanitatis' en 2020, el cantante solo aparece en el Registro Mercantil como administrador único y accionista mayoritario de una sola empresa.
Tiene como nombre The Boy On Stage y se constituyó en 2007. En el ejercicio del año 2019, registró unos beneficios de 79.000 euros. En 2018 había sido de 250.000 euros. La empresa declaraba entonces tener dos empleados fijos, quienes recibieron un sueldo de 305.533 euros en 2019. Entonces, contaba con un activo cercano a los cuatro millones de euros.