Muchas veces un solo detalle puede estropear una cita. Da igual si en el resto congenias a la perfección. Si hay algo que no te gusta, puede que ya no haya nada que hacer. En el caso de Inés (46 años) ha sido la altura de su soltero. La quiromasajista de Santander, a la que comparan con Bridget Jones por algunas de las situaciones surrealistas que ha vivido en sus relaciones pasadas, ha llegado a ‘First Dates’ dispuesta a encontrar a un hombre con el que poder casarse. Estuvo a punto de pasar por el altar, pero, a unos meses de la boda, se suspendió. Ahora, ansía su boda soñada: "Quiero una boda, como soy yo, al aire libre, con muchas damas de honor…".
Tenía la esperanza de que ‘First Dates’ le presentase a esa pareja perfecta. Solo pedía que no sea un muermo y que tenga el don de la empatía, pero la cosa no ha salido como ella esperaba. En Óscar, un comercial de Castro Urdiales (51 años), ha encontrado a esa persona, excepto por el detalle: es algo más bajito que ella. "Según le he visto me ha dado la sensación de que le conocía, pero le he visto muy bajito para mí. Lo mismo que pueden gustarme que sean feos, también necesito que sean altos", ha confesado detrás de cámaras.
Aun así, ha decidido conocerle algo más en profundidad. Lo que ha visto durante la cena, le ha gustado y mucho. La cita ha tenido todos los ingredientes: una conversación fluida, química y mucho humor. También muchos nervios. "Ahora mismo tengo las piernas como un flan", le ha confesado Óscar a la vez que se ha reído por el temblor de sus manos.
"¿Cómo debería de ser el chico que te enamore?", le ha preguntado él. "Empático, extrovertido, activo, pero positivo", ha contestado mientras que Óscar le ha puntualizado que le estaba describiendo a él. Emocionado con lo visto hasta el momento, le ha dicho que la conquistaría con sus lentejas o con el bacalao al pil pil. "Si nada funciona, una buena paella, ya verás", ha dicho a las cámaras de ‘First Dates’. Para el comercial, la cosa no podía ir mejor.
Lo que no ha esperado es que su cita reconociese a las cámaras de ‘First Dates’ que, mientras transcurría la cita, Inés ha estado pensando en un hombre al que conoció en verano: "Me he dado cuenta de que estoy enamorada de otra persona. ¡Qué coño hago aquí!, he llegado a pensar. Pero no se lo voy a decir a él porque se me va hundido de aquí".
Aunque Óscar no se lo esperaba, Inés ha tenido muy clara su decisión desde el principio: "Yo no tendría una segunda cita con Óscar. Me ha aparecido una persona increíble y me he reído mucho pero no es el perfil de persona que busco". A eso, él ha respondido: "Sé que no pega ahora, pero tengo que ser honesto. Yo sí que tendría una segunda cita porque, desde mi punto de vista, creo que sí podríamos tener…". Ha sido en este momento cuando ha vivido un momento ‘tierra trágame’ al ver cómo su cita, que le acababa de rechazar, se ha puesto a reírse a carcajadas. No ha podido parar y han tenido que hacer varias tomas ante el enfado de Óscar que, aunque ha intentado quitarle hierro al asunto, no le ha sentado muy bien.