Dani (29 años) está cansado de relaciones que no llegan a nada. Quiere a una mujer con la que sentar la cabeza para casarse y formar una familia. Hasta ahí todo normal. El problema es que este empresario de Almería tiene además otros requisitos añadidos que acaban echando para atrás a sus citas. Eso, y que deja mucho que desear en las formas.
"Quiero a una mujer que no sea una mujer que esté ahí por las noches tirada en la calle. Eso de que esté todos los fines de semana para arriba y para abajo… para mí no lo quiero. Quiero una mujer que esté centrada en su casa, en su trabajo, en formar una familia y en querer casarse. Que sepa hacer comidas, hacer la cama, poner la lavadora… Una mujer de verdad porque ahora mismo no quedan pocas. Maquillarse todas saben", le ha espetado a un Carlos Sobera (64 años) muy sorprendido con sus palabras.
A su lado, su hermano menor Cristian, quien también ha recurrido al dating show en busca de una mujer. Aunque en su caso es menos ‘tradicional’. Lo único que quiere es a alguien fiel y cariñosa que le haga feliz. Ha tenido más suerte con su cita que Dani, cuya pareja sentada enfrente casi huye despavorida.
A Azahara (28 años), una dependienta de Córdoba, no solo no le ha gustado físicamente, sino que además ha tenido que escuchar toda esa retahíla de requisitos de Dani. Le ha tachado de antiguo por decir algo. "Me gusta que vaya a Mercadona y que me compre un Kinder Bueno, por ejemplo… Que tenga detalles y que le gusta estar en su casa, que sea respetuosa con su marido…", le ha empezado diciendo a su cita mientras que ella ya sabía por dónde iba a ir la cosa.
"Lo veo como una persona muy chapada a la antigua. Sinceramente creo que necesita una persona que sea más que su pareja, su madre. Que haga y que deshaga como él quiera y conmigo no va", ha reconocido Azahara a las cámaras de ‘First Dates’. Cuando encima le ha dicho que no quería casarse ni tener hijos, a Dani casi le da algo en medio de la cita.
"Si tienes algún deseo de tener hijos, tampoco te queda mucho. Tienes ya 28 años", le ha espetado Dani a la dependiente cordobesa, quien no daba crédito. Por todo ello es lógico que le dijese que no a una segunda cita: "Creo que los pensamientos en cuanto a pareja y tuyos propios no van conmigo. Eres una persona que está muy chapada a la antigua en ese aspecto. Buscas una mujer de su casa, que se quiera casar y que quiera tener hijos. Y yo no voy con ese pensamiento. Soy libre en ese aspecto". A Dani no le ha ido nada bien, pero menos mal que el viaje no ha sido en balde porque su hermano Cristian sí que ha tenido más suerte con Serena.