Pablo Motos deja sin palabras a Young Miko en 'El Hormiguero' tras esta contundente afirmación

No es ningún secreto que 'El Hormiguero' es uno de los programas más vistos de la parrilla televisiva. Muestra de ello es que noche tras noche protagoniza el minuto de oro o se posiciona como el espacio más seguido del día. Pablo Motos (58 años) y sus hormigas reciben a los artistas y celebrities más destacados dentro y fuera de nuestras fronteras. Para ser un invitado del programa hay que tener galones, pero eso no siempre garantiza que sea conocido por el gran público. Ese puede ser el caso de Young Miko. 

La cantante es una de las máximas referentes de la música urbana latina y un icono LGTBIQ+. Su talento y repercusión es tal que ha encandilado a artistas tan reconocidos como Bad Bunny, con quien ha colaborado en su último disco, 'Nadie sabe lo que va a pasar mañana', lanzando al mercado 'Fina'. Con Pablo Motos y sus hormigas hemos descubierto un poco más de la puertorriqueña, natural de Añasco. "Te escucho mucho. Gracias a tu trabajo estoy decubriendo mucho talento", le ha dicho el presentador al recibirla en plató. 

Han hablado de lo difícil que puede resultar hablar con tus padres de tu orientación sexual o de sus secretos para hacer frente a los momentos más complicados. "Yo lo que hubiera querido es que me dijeran que no era la única que se sentía así", ha expuesto la cantante puertorriqueña. Han comentado lo díficil que fue su primera actuación. "Era la primera vez que me subía a una tarima y vi delante de mí como se caía el segundo piso de la discoteca en la que estaba y había muchísima gente. Por obra y milagro de Dios, nadie salió lastimado", ha relatado. No pudo volver a subirse a un escenario hasta dos años después: "Con todo esto de la pandemia...". 

Pablo Motos propició que los espectadores de 'El Hormiguero' conocieran más a Young Miko, pero no se quiso despedir de la artista sin hacerle una bonita confesión. "No lo puedo decir con palabras, pero tienes algo especial". Ella, visiblemente emocionada, solo ha podido agradecerle las palabras que acababa de decirle. 

De Soundcloud a la fama, así ha sido la trayectora de Young Miko

Young Miko es el nombre artístico de María Victoria Ramírez de Arellano Cardona. Su carrera comienza hace apenas cinco años, cuando empezó a publicar su música a través de la plataforma SoundCloud desde su habitación. Mientras tanto, cursaba los estudios de Artes Visuales en la Universidad Interamericana de Puerto Rico y se costeaba sus gastos trabajando como tatuadora. 

Sus temas se hicieron virales. Los ritmos del trap y las letras afinadas hicieron que Tiktok devorase sus canciones. En 2021 publicó su primer sencillo, 'Quiero', en el que colaboró con artistas como la también puertorriqueña Villano Antillano. Esto le permitió dar el salto al siguiente nivel. Siguió trabajando y a mediados de 2022, en julio, se consagró como una de las artistas urbanas más aclamadas. 

Bad Buuny la invitó a subir al escenario a interpretar 'Puerto Rican Mami y Riri'. Era uno de los primeros hits que Young Miko había lanzado, el mismo que conquistó a los millones de seguidores del 'conejo malo'. "No sé por dónde empezar.. quiero decir tantas cosas. Bad Bunny, gracias. No solo por regalarme la mejor noche de mi vida, sino por todo lo que haces por las mujeres en el género y fuera de la industria de la música. Gracias a personas como tú y gracias a personas como ustedes es que está pasando lo que está pasando. Me siento en una nube de amor y felicidad", compartió con sus más de cinco millones de seguidores en Instagram.

¿Por qué se llama Young Miko?

María Victoria Ramírez de Arellano Cardona no es un nombre, digamos, comercial. Por lo que la artista decidió buscar un pseudónimo que se ajustara a los proyectos que quería llevar a cabo. Busco y rebuscó hasta que encontró uno que es muy significativo para ella. 'Miko' es una palabra japonesa que hace referencia a las sacerdotisas de los templos, mientras que 'young' significa joven. Con esta combinación de palabras, la puertorriqueña deja constancia de su debilidad por la cultura de Japón.