Marilyn Monroe es uno de los personajes más reconocidos de la Historia moderna. Protagonizó decenas de películas, centenares de campañas de publicidad e, incluso, le cantó 'Cumpleaños feliz' al mismísimo presidente de los Estados Unidos John F. Kennedy. Pero, como bien dice Georgina: "Muchos conocen mi nombre, pocos saben quién soy". La vida de la actriz no fue tan maravillosa como, a priori, se puede pensar. Lo plasmó Joyce Carol en la novela 'Blonde', publicada en 1999, 37 años después de su trágica muerte.
"Marilyn Monroe era puro fuego, sexualidad a flor de piel, romances turbulentos, pero también era frágil, una mujer asustada y repleta de inseguridades que buscaba en otros... Ese amor que ella misma se negaba. Una artista emblemática cargada de conflictos y temores, de pasiones destratadas; una niña que no dejó de huir hacia delante, y llegó a burlar a la propia muerte par convertirse en leyenda". Con estas palabras la describe la novelista, unas palabras que resumen también la película homónima que Netflix acaba de estrenar.
Ana de Armas protagoniza esta historia, escrita y dirigida por Andrew Dominik, en la reimagina la vida interior de Marilyn Monroe. Desde su infancia extremadamente complicada, como Norma Jeane Mortenson, hasta su ascenso a la fama en Hollywood y sus relaciones amorosas poco duraderas. 'Blonde' y sus casi tres horas de duración, es el resultado de 12 años de trabajo.