Parece que, a medida que vamos cumpliendo años, hay una serie de normas y códigos no escritos que invitan a dejar a un lado estilismos con los que nos sentíamos cómodas para abrazar otros mucho más anodinos, pero que nos corresponden por edad. La minifalda y las botas militares, tan en tendencia esta temporada, parece reservadas casi en exclusividad para las veinteañeras y llevar una sudadera de borreguitopasados los 50 produce una sensación de vértigo inexplicable.
Nada que ver con la realidad. Seguras de sí mismas, con una fuerte personalidad y con un estilo más que definido, las mujeres de más de 50 están en la edad perfecta para liberarse de clichés y estereotipos para empezar a abrazar la moda de una forma muy interesante y divertida. Así lo ve Rosa Iglesias, fundadora de una de las asesorías de imagen con mayor impacto en redes sociales: El Estilario. Con la idea de romper esos clichés, Iglesias invita a desprenderse de ideas preconcebidas a la hora de encontrar ese estilo que nos define, sobre todo, pasados los 50.
Si los vestidos holgados, que no anchos, se han convertido en la prenda comodín de las mujeres más maduras, un sinfín de prendas están esperando que éstas les den una segunda oportunidad. Los metalizados, las botas militares, los vestidos cortos o las minifaldas no son exclusivos de un público más joven. Las mujeres de 50 pueden apostar por el estilo que más les guste sin tener miedo al qué dirán. Lo único importante es la imagen que nos devuelve el espejo y estar a gusto con ella y eso es lo que descubrimos de la mano de Rosa Iglesias a través de sus 10 trucos para vestir informal y con un toque elegante a partir de los 50.
- Reconectar con la propia imagen
“A las 50 se produce una ruptura con la imagen que teníamos de nuestro cuerpo, sobre todo, después de la menopausia. Los cuerpos cambian, puede que tengamos más barriga o que se acumule grasa en lugares en los que antes no la había. No hay que castigarse, hay que mirarse en el espejo y asumir que esa es nuestra fisonomía actual y trabajar en base a ella”, señala la experta.
“Tenemos 50 y no, no somos viejas. Eso es algo que hay que trabajar desde la actitud. La edad es sólo un número y cómo nos enfrentemos a ella es clave. No hay que dejarse llevar por lo que se supone que debería ser una mujer con 50 porque eso no refleja en absoluto el espíritu de cada una”, comenta.
“Hay que huir del edadismo. Pensar que con 50 no puedes usar prendas de cuero o zapatillas es un error. Muchas veces caemos en recurrir a un estilo más clásico y convencional y con eso lo que hacemos es echarnos años encima. Cuando tienes 30 buscas dar una imagen más seria y formal, de estatus, sobre todo, en el trabajo y por eso buscas líneas más clásicas. Con 50 no necesitas proyectar esa imagen porque la clase ya te la pone la edad, no te hace falta reflejarlo con la ropa. Apostar por looks mucho más informales es la clave. Puedes llevar un traje sastre, pero mejor con zapatillas”, recalca Iglesias.
“A ciertas edades es mejor apostar por la calidad que por la cantidad. El cutrerío se advierte mucho más con 50, tu edad es algo que te aporta estatus, eso se tiene que reflejar con la ropa. No es necesario invertir una gran cantidad de dinero ni apostar por algo caro, es más bien decantarse por prendas que se vean de mayor calidad. Tejidos más nobles, mejores confecciones…”, advierte.
- No renunciar a las tendencias
“La edad aporta algo positivo a nuestro estilo y es que ya no nos dejamos llevar exclusivamente por las tendencias. Tenemos claro cuál es el estilo que nos define y las prendas que nos quedan bien, aunque eso no implica que tengamos que renunciar a las tendencias. Si se llevan los tejidos metalizados, ¿por qué no los vamos a llevar? La clave está en llevar las tendencias a nuestro terreno, adaptarlas a nuestro estilo, y no dejar que sea la tendencia la que tome las pautas en nuestro estilismo”, recomienda la experta.
- No avergonzarse ni esconderse
“Muchas veces tendemos a ocultar lo que no nos gusta de nuestro cuerpo y recurrimos en exceso que por lo ceñido porque encaja más en nuestro estilo. Eso puede hacer que nos veamos más mayores, sobre todo, si cruzamos la línea entre lo holgado y lo ancho. Hay que saber combinar las prendas y los complementos para que las más holgadas nos ayuden a vernos favorecidas. Insisto, hay que pensar en nuestro cuerpo actual, quererlo y trabajar sobre él nuestro estilismo”, expone Iglesias.
“Es un término que cada vez está más en boga y del que hay que huir para evitar caer en estilismos con los que parezcamos más mayores. No hay una edad determinada para lucir un tipo de prendas y a partir de los 50 no hay pieza o tendencia que esté prohibida. Si te gusta y te ves bien, ¿por qué no lo vas a llevar?”, sentencia la experta.
“Ahora cada vez hay más mujeres de más de 50 que son un referente de estilo. Actrices, cantantes, influencers… el abanico es muy amplio y hay un estilo diferente en el que buscar inspiración para cada mujer”, comenta.
- Alejarse de los estándares
“Es imprescindible no dejarse llevar por los se supone que a los 50 hay que llevar tal, lo recomendado en las mujeres maduras es lucir cual… Cada mujer tiene que ver reforzada su seguridad con aquello que la hace sentir bien, no con lo que la sociedad presupone que debe llevar por haber cumplido ya los 50”, aconseja.
“El concepto de la edad cada vez está más desdibujado, mientras que el concepto femenino cada vez está más reforzado. Las mujeres ahora están empoderadas y eso permite que podamos disfrutar de las ventajas de cada década. Divertirse con la ropa, sin que sea un sufrimiento enfrentarnos al armario, es clave para desarrollar los estilismos”, concluye Rosa Iglesias.
Looks informales para vestir informal y elegante a partir de los 50