Los signos más negativos del zodiaco

Mientras que algunos signos del zodiaco brillan con luz positiva, otros parecen estar polarizados hacia el lado contrario. Son eficaces para localizar problemas y encontrar soluciones realistas, pero el precio que deben pagar es el del pesimismo y la negatividad. ¿Te has sentido así alguna vez?

Si es el caso, echa un vistazo al ranking que te dejo a continuación, porque voy a contarte quienes son los signos más negativos del zodiaco y de donde surge su negatividad. Quizá te ayude a ver tu vida desde otra perspectiva.

Escorpio

Si hay un signo que acumule papeletas en la tómbola de la negatividad, ese es Escorpio. Conocido por su intensidad y su pasión, este signo regido por Plutón tiene una personalidad algo complicada. Posesivo, celoso y rencoroso, es fácil que el escorpión acabe obsesionándose con lo peor de la vida.

En especial, cuando se siente traicionado. Si Escorpio considera que alguien le ha fallado o le ha herido, su naturaleza vengativa sale a la luz y se aferra al rencor. Le cuesta olvidar lo que ha pasado, y empieza a ver malas intenciones en cada pequeño gesto.

Esta característica puede hacer que se le perciba como un signo especialmente negativo, sobre todo cuando el resentimiento empieza a prolongarse y desemboca en conductas tóxicas o manipuladoras.

Capricornio

Todos conocemos a Capricornio como un signo ambicioso y disciplinado, pero tras estas características tan positivas se esconde un lado oscuro: la responsabilidad excesiva, la frialdad y la mente calculadora.

Para Capricornio, es mejor ponerse en lo peor y luego ver que sucede. Porque si confía en que las cosas irán bien, podría relajarse y no llegar a cumplir con todo lo que se ha propuesto. Esto hace que, a menudo, Capricornio viva en una espiral de estrés y sobre exigencia.

Además, su responsabilidad excesiva y su mente cuadriculada hace que Capricornio a veces se perciba como alguien distante o sin emociones. Todo esto hace que parezca siempre insatisfecho con su vida, crítico en exceso e incluso algo pesimista.

Virgo

Si en algo destaca Virgo, es en ser analítico y un obseso de los detalles. Estas dos cualidades son, esencialmente, positivas. Pero pueden volverse negativas cuando se llevan al exceso.

La tendencia de Virgo hacia la perfección hace que esté constantemente criticándose a sí mismo, incapaz de sentirse satisfecho con nada de lo que consigue, con ninguno de sus logros.

Esta crítica constante acaba reflejándose también en su relación con los demás, y aunque es bien intencionada, puede resultar a ser muy dañina e hiriente. Es por eso que muchos perciben a Virgo como un signo demasiado exigente, difícil de complacer e inherentemente negativo.

Cáncer

Cáncer es un signo muy emocional, conectado de forma profunda con su mundo interior y con su familia. Pero es precisamente esta naturaleza sensible la que puede hacer que a veces peque de pesimista.

Para Cáncer el mundo es un lugar peligroso, en el que cualquier persona puede acabar haciéndole daño por su forma de ser. Desconfía de los demás y cree que todos quieren (y pueden) hacerle daño.

Así que se esconde tras su caparazón, y las pocas veces que se abre, si sale mal, es incapaz de olvidar lo sucedido. Esto se debe a que, además de ser sensible y algo cambiante, Cáncer es uno de los signos que más se aferra al pasado del zodiaco.

Tauro

Si tienes algún conocido de Tauro seguro que te cuesta imaginarlo como alguien negativo. Pero si realmente conoces a alguien de este signo, ya sabes a qué me refiero. Tauro es un signo que suele vivir en paz y en calma, que intenta simplificar su vida y no se complica demasiado.

Pero tras esta fachada de tranquilidad se esconde la bravura del toro. Basta con llevarle la contraria o intentar demostrarle que está equivocado para activar su lado más negativo, más testarudo y difícil de tratar. Cuando Tauro está empeñado en llevar la razón, puede volverse muy negativo.

Algo similar sucede cuando se activa su lado más celoso y posesivo. Todas las personas a su alrededor se vuelven, de repente, amenazas, y cuesta sacarlo de la idea de que todo va a salir mal y de que va a ser traicionado.