El pueblo con la colegiata románica más auténtica de España: un tesoro medieval en Cantabria

Así es una de las poblaciones más encantadoras de nuestro paí, una joya única en España

Gustavo Egusquiza
Gustavo Egusquiza

Periodista especializado en viajes

Santillana del Mar
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Ubicado en la región de Cantabria, Santillana del Mar es un destino que fascina a todo aquel que lo visita. Con su arquitectura románica bien conservada y su proximidad a las famosas cuevas de Altamira, este pueblo medieval representa un verdadero viaje en el tiempo. Sus calles empedradas, mansiones históricas y la majestuosa Colegiata de Santa Juliana hacen de Santillana del Mar una joya única en España.

Edificio en Santillana del Mar
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Historia de Santillana del Mar

Santillana del Mar tiene su origen en la Edad Media, cuando los primeros asentamientos se construyeron alrededor de la Colegiata de Santa Juliana en el siglo IX. Durante siglos, este enclave prosperó como centro religioso y comercial, atrayendo a nobles y comerciantes que edificaron sus imponentes casonas. La villa se consolidó como una de las localidades más emblemáticas de Cantabria, gracias a su preservación histórica y su relevancia artística.

Las casas blasonadas del pueblo nos hablan de un pasado próspero, reflejo del auge económico y político de la nobleza santillanense. En cada esquina, los visitantes pueden admirar la evolución de la arquitectura desde el siglo XV hasta el XVIII, con palacetes que muestran estilos renacentistas y barrocos en perfecta armonía con la esencia medieval del pueblo.

Santillana del Mar
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Santillana del Mar
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Altamira: la cueva que reveló el arte prehistórico

La cueva de Altamira, ubicada en Cantabria, es uno de los mayores tesoros del arte rupestre paleolítico. Descubierta en 1868 por Modesto Cubillas y posteriormente estudiada por Marcelino Sanz de Sautuola, contiene impresionantes pinturas que datan de hace más de 15.000 años. En sus paredes se encuentran figuras de bisontes, ciervos y caballos, representadas con una sorprendente técnica de perspectiva y aprovechamiento del relieve natural de la roca. Debido a su importancia histórica y artística, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1985.

Qué ver y hacer en Santillana del Mar

La principal atracción de Santillana del Mar es la Colegiata de Santa Juliana, una de las máximas expresiones del arte románico en España. Su claustro, con capiteles tallados con motivos bíblicos y animales fantásticos, es una verdadera obra maestra.

Santillana del Mar
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Las calles de Santillana son un museo al aire libre, con edificios como la Torre de Don Borja, el Palacio de los Velarde, y la Casa del Águila y la Parra, cada uno con un legado histórico fascinante. No hay que perderse la Plaza Mayor, un punto de encuentro rodeado de edificaciones señoriales.

Para los amantes de la historia, la visita al Museo de Altamira es imprescindible. Aunque las famosas pinturas rupestres de las cuevas originales están protegidas, el museo ofrece una reconstrucción fiel que permite apreciar el arte paleolítico en todo su esplendor.

Cuevas de Altamira
turismoencantabria.com

Los viajeros que buscan naturaleza pueden explorar los senderos cercanos que conducen a parajes montañosos con vistas panorámicas del Mar Cantábrico. También se pueden realizar excursiones a la costa para descubrir playas como la de Cóbreces o Tagle, ideales para disfrutar del sonido de las olas y la brisa marina.

Naturaleza en los alrededores de Santillana del Mar
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La gastronomía de Santillana del Mar

Santillana del Mar deleita a los visitantes con una oferta gastronómica basada en productos de la región. Su cercanía con el mar Cantábrico se traduce en platos de pescado y marisco fresco, como el sorropotún, un guiso de bonito típico de Cantabria. No pueden faltar los quesos artesanos, especialmente el queso de nata, originario de la zona.

Los amantes de la carne podrán disfrutar del cocido montañés, preparado con alubias, berza y embutidos, un plato ideal para los días frescos en Cantabria. En los restaurantes del pueblo, también se sirven deliciosos postres como los sobados pasiegos y la quesada, dulces tradicionales que reflejan el sabor auténtico de la región.

Dónde dormir en Santillana del Mar

Santillana del Mar ofrece una gran variedad de alojamientos con encanto. Para quienes buscan una experiencia única, hay posadas y hoteles ubicados en antiguas casonas medievales, como el Parador de Santillana, un hotel con una atmósfera histórica incomparable.

Los visitantes que prefieren un ambiente más rural pueden optar por alojamientos en los alrededores, donde los hoteles boutique y las casas rurales ofrecen tranquilidad y vistas espectaculares a los paisajes cántabros.

También hay opciones para viajeros con presupuestos más ajustados, con hostales y pensiones acogedoras que permiten disfrutar del pueblo sin renunciar al confort. Independientemente de la elección, alojarse en Santillana del Mar es una oportunidad para vivir en primera persona el encanto de una villa medieval.