Todas las reproducciones que no han hecho justicia a la princesa Leonor

Juguetes, estatuas y, ahora, monedas con su peor cara

Menudo rollo ser la princesa Leonor. Al hecho de no poder comer todos los dulces que cualquier niño de su edad quisiera, haberSUPLICADO a sus padres poder ver OT como toda su clase para no ser la ‘margi’, hay que añadir la malísima suerte que tiene cada vez que le hacen una reproducción. Y, cuando eres de la familia real, te hacen muchas. A menos que dejes de formar parte de ella, como Marichalar, y, en ese caso, el Museo de Cera se deshará de ti. Pero Leonor llegó para quedarse por lo que esa opción no es válida. Así que solo le queda aprender a vivir con este infortunio, que no es poca cosa… Este ‘gafe’ se ha visto confirmado con la publicación, en las últimas horas, del diseño de la que será su primera moneda con su rostro grabado. Su abuelo sí se parecía en su versión en las pesetas, su padre igual en los euros, pero ella, ni por asomo. Es más, agradeceríamos que en los márgenes de las monedas estuviera esta leyenda ‘la de atrás es la princesa’. Así se evita cualquier error.

Leonor tiene bebés reborn con su cara cuando nació, muñecas que emulan su peinado y look en su primer día de colegio y otras en sus vacaciones en Palma, pero, sin duda, la que más la habrá traumatizado es la reproducción que el Museo de Cera de Madrid hizo de ella solo tres años atrás. Diréis, es que está muy cambiada, en ese tiempo una niña de su edad se transforma. No, los que la transformaron fueron quienes esculpieron ese cuello y cada uno de esos dientecillos que asoman en su boquita sonriente. ¿Os imagináis que os hubieran hecho una estatua semejante en plena pre-adolescencia? ¡Menudo trauma! A ella no la vimos ni afectada. Si nos hubiera pasado a nosotros, es probable que en el siguiente 12 de octubre, el desfile lo hubiésemos visto a través de un saco como si fuésemos el fantasma de ‘El Orfanato’. Tener sangre azul te debe volver inmune a esta clase de dramas…