La sala Florida Park de Madrid acogió el debut en la música del mayor de los tres hijos de la actriz Lucía Bosé y el torero Luis Miguel Dominguín. Con 21 años recién cumplidos, Miguel Bosé (67 años) se estrenó hecho un manojo de nervios en una actuación muy esperada que fue retransmitida por TVE dentro del programa ‘Esta noche... fiesta’.
A pesar de que de pequeño quería ser oceanógrafo, era inevitable, teniendo en cuenta la familia en la que se crio, que acabara convirtiéndose en bailarín, actor, presentador, músico y cantante de éxito. Miguel creció en un ambiente artístico vibrante. Sus padres eran amigos de figuras de la cultura como Ernest Hemingway o Picasso. Este último le introdujo en el mundo de la danza y, en el cante, fue apadrinado por Camilo Sesto, quién lo presentó en el programa de José Mª Íñigo 'Esta noche...fiesta'. No cabe duda que, justo 'esa' noche, nació la estrella.
Así fue el debut de Miguel Bosé
Pese a que Miguel Bosé, semanas antes de este debut oficial, confesaba en las páginas de revista Lecturas que no se sentía del todo arropado por su país. “En España no me quieren, por eso me voy fuera”, afirmaba Miguel, que trabaja más en Italia que en nuestro país. “Esto viene dado por ese famoso complejo de los españoles de buscar fuera nuevos valores cuando aquí los tienen fabulosos”, se quejaba el cantante. Y añadía: “Por tener los padres que tengo, se me exige aún más, porque ellos son dos mitos, cada uno en sus respectivos campos”.
El cantante pudo comprobar el 26 de abril de 1977, día de su debut en el Florida Park, que se equivocaba, que España lo quería. Los padres del debutante, que levaban nueve años separados, no quisieron perderse el concierto. Estaban casi tan nerviosos como él. “La profesión nuestra da un sentido de la responsabilidad y esto tiene para él una gran responsabilidad; por lo tanto, no puedo evitar estar nervioso”, decía su padre. A la pregunta de si esta aventura en la música era flor de un día o si Miguel está preparándose en serio, Lucía contestaba con firmeza: “Mi hijo se lo toma muy en serio; si no, no lo haría”.
Hubo también varios rostros conocidos entre el público. Raffaella Carrà, por ejemplo, se desplazó de Italia expresamente para ver a Miguel cantar. Entre su repertorio de canciones, el tema más exitoso resultó ser 'Linda', una balada romántica que conquistó a su público de la misma forma que lo hace 46 años más tarde.
La repercusión de su actuación
Tras la actuación, Miguel Bosé se mostró muy contento y satisfecho de su debut como cantante. No se podía negar que el programa de Íñigo era muy buen trampolín publicitario para una nueva estrella en el difícil mundo de los artistas.
Miguel acababa de grabar su primer disco y esperaba que esta actuación sirviera para poner al público alerta. Después de la actuación en el programa de Íñigo, la fiesta continuó en la finca de Somosaguas propiedad de Lucía Bosé. Allí se reunieron varios de los asistentes que venían del Florida Park con otros que venían de la boda de Palomo Linares y Marina Danko.
Mónica Randall, La Polaca o la actriz italiana Stefania Casini celebraron el éxito de Miguel y no ahorraron aplausos y felicitaciones. Hasta Pastora Vega se animó incluso a bailar con el homenajeado.
Revista Lecturas entrevistaba a Miguel Bosé poco después del debut
Días después de su debut, Miguel se sentaba con Lecturas y respondía a algunas preguntas sobre su incipiente carrera. La primera cuestión era evidente. Llevábamos años oyendo hablar de su afición a la música. ¿Por qué no había dado el salto hasta ahora? “No había pensado dedicarme a la música; me han propuesto hacerlo y he aceptado. La primera vez no me lo tomé en serio, ahora sí”, explicaba el cantante.
Cuando pedimos saber cuál era la primera faceta artística que despertó en él, lo tenía claro: “El baile. Cuando estuve viviendo en casa de Picasso, me llevaba a tomar clases de baile, pero a mis padres esto no les convenció y lo dejé. Luego volví al baile a los 14 años”.
¿Crees que vas a revolucionar el mundo de la música con tus canciones?, le preguntábamos. “A revolucionar, no; sí pienso que ayudaré a hacerla evolucionar un poco”. “Aporto un estilo, una voz, una imagen, una manera de ser”, contestaba con aplomo. Y es que, sin duda, esta seguridad y talento que derrochaba el cantante hace exactamente 46 años y que le hacía seducir con su personalidad, le acompañó para siempre.