Daniel Sancho recibió el veredicto de su caso entre lágrimas. Los presentes en la lectura de la sentencia de la Corte de Koh Samui el pasado jueves fue lo que apuntaron. El hijo de Rodolfo Sancho no dejó de llorar mientras se iba desgranando su condena. Su defensa llevaba tiempo asegurando que eran optimistas, que la pena que podría imponerse al joven sería de unos ocho años de privación de libertad. Tan firmes habían sido que, posiblemente, era lo que el condenado esperaba.
Fue el propio Sancho quien, horas antes, afirmó que estaba preparado para lo mejor y para lo peor. Parecía que los meses de prisión preventiva habían hecho que reflexionase y encontrase un camino a su futuro. No obstante, cuando llegó el momento clave, se derrumbó. La Corte de Koh Samui era firme en su sentencia. Condenado por los tres delitos de los que se le acusaba. La única prerogativa fue rebajar la pena de pena de muerte a cadena perpetua.
Sancho se rompía y únicamente logra articular dos palabras. Un grito de terror dirigido a la única persona en la que confía, la que ha estado a su lado en estos meses y ha orquestado todo lo que ha ocurrido a su alrededor: su padre, Rodolfo Sancho.
El grito desesperado de Daniel Sancho
“Papá, ayúdame”. Daniel Sancho solo lograba pronunciar este grito desgarrado. El hijo del actor había estado llorando durante toda la lectura del veredicto. Una vez ya conocía su condena, se dirigió a su padre para pedirle ayuda. Hasta ahora, Rodolfo Sancho ha sido quien le ha guiado en estos meses. Quien ha buscado su defensa y ha llevado la voz cantante. Su madre, Silvia Bronchalo, también presente en la sala, se derrumbaba.
La relación entre los padres de Daniel Sancho es inexistente. Solo han coincidido en los momentos en los que la Corte de Koh Samui les ha convocado. Unidos por su hijo y poco más. De hecho, antes de la sentencia se filtraba el enfado del propio Daniel con su madre por haber denunciado a su padre. El hijo del actor está muy unido a su padre. Es la figura que le guía en todo el momento.
La ofensiva judicial que Silvia Bronchalo inició contra el padre de su hijo por vejaciones molestó y mucho a Daniel. Así se lo hizo saber, al parecer. La madre de Daniel Sancho vio como su causa era archivada pero parece que va a recurrir este archivo en breve. Si en un primer momento se afirmaba que entre los padres de Daniel Sancho no había mucho entendimiento, la denuncia confirmó lo rumoreado.
Reunión de urgencia en la prisión de Koh Samui
Horas antes de ser trasladado a su nuevo emplazamiento, la cárcel de Surat Thani, Daniel Sancho se reunía con su padre y su equipo legal en Koh Samui. El joven debía abandonar el centro penitenciario en el que ha estado estos doce meses para instalarse en uno nuevo. En Koh Samui no hay condenados a más de 15 años de pena. La nueva prisión parece menos amable que la que ya conoce.
A esta reunión de urgencia tras la condena acudía el núcleo duro que ha rodeado a Daniel desde su detención. La estrategia legal ha estado marcada por Marcos García-Montes desde España. El letrado, junto a los criminólogos Carmen Balfagón y Ramón Chipirrás, ha sido quien ha ido dirigiendo todo. En Tailandia, han confiado en un abogado de oficio para que ejerciese de forma efectiva en el juzgado.
El equipo de Sancho se encuentra preparando el recurso de apelación que van a presentar contra la sentencia. No están conformes con el veredicto y así lo van a consignar. Se abre un nuevo horizonte para Daniel Sancho, que, por el momento, continuará en prisión provisional. García-Montes ya afirmaba esta pasado jueves que no van a solicitar su puesta en libertad.
Silvia Bronchalo, por su cuenta
Daniel Sancho recibía horas antes a su madre. Silvia Bronchalo acudía el mismo jueves por la tarde a visitar a su hijo. Rota de dolor ante la sentencia, la madre del joven se encontraba muy afectada. Bronchalo había sido especialmente crítica con la estrategia legal que se estaba llevando a cabo por el equipo de su expareja. Tampoco mantenía un entendimiento suficiente como para ser tenida en cuenta.
Como ha sido habitual en este tiempo, Bronchalo visitaba a su hijo el jueves mientras que Rodolfo Sancho lo hacía el viernes. Una distancia prudencial entre los padres de Daniel, que permanecen en Tailandia tras la lectura del veredicto. ¿Hasta cuándo? Por el momento se desconocen estos términos. No obstante, con el traslado de Sancho a una nueva prisión y el plazo de sesenta días para presentar recurso, es de esperar que pronto regresen a España de nuevo.