Tener confianza en uno mismo es clave para avanzar en sus retos personales, potenciar fortalezas y luchar por lo tuyo. Estar seguro de ti mismo es esencial, principalmente, para hacer una buena gestión de cualquier crisis personal o profesional y efectuar así una buena toma de decisiones.
Si te consideras una persona con autoconfianza, seguramente no seas plenamente consciente de que te hablas a ti mismo para perpetrarla en el tiempo. Eso, al menos, asegura la prestigiosa doctora Cortney S. Warren, quien recientemente se ha atrevido a enumerar las principales frases que las personas seguras se dicen a sí mismas. Si tú no te lo consideras, comienza haciéndolas tuyas mientras trabajas tu inteligencia emocional. Un mantra que solo te dará cosas buenas:
El “No”, qué importante es saber decirlo
Los individuos seguros emocionalmente se sienten conformes poniendo límites, es decir, en definitiva, saber decir que no a aquello que no les agrada o no quieren en su vida. Es más, si es necesario lo dicen claramente ante quien les haga una propuesta que no les guste. Puede que sea mucha carga si no estás acostumbrado, por lo que no tienes porque ser taxativo. Con la diplomacia se va a muchas partes y, lo importante, es que no acabarás haciendo cosas que no te apetece como hasta ahora sí venías haciendo. “Lo voy a pensar, aunque de momento no quiero”, puede servirte de respuesta-suave comodín.
“Estoy orgulloso de ser como soy, con mis virtudes y defectos”
Pocas personas son capaces de verbalizarlo. Todos debemos mejorar, claro que sí, pero sobre todo es importante que creas en ti y tu potencial. Importante frase para cuando los demás te insinúen hacia donde deben ir tus pasos -como si todos fueramos una oveja más de un mismo rebaño-. Enorgullécete de lo que te hace diferente y especial.
“En caliente, mejor no”
No solo frase, pues es un comportamiento de vida de persona inteligente emocionalmente. Conseguir que lo que alguien te dice no afecte a tu estado de ánimo, es ya un nivel pro. Pero tú lo puedes conseguir, claro que sí. Ante cualquier comentario ofensivo o agresivo, toma en cuenta la clásica recomendación de respirar diez segundos y… GanaráS la partida en situaciones de discusión o mucha tensión.
Nada de “Yo soy así”. Cámbialo por “¿Soy así?
Eso es lo que se plantean los seguros de sí mismos. Y es que si tienen la suerte de que un amigo o familiar muy cercano les comenten que su comportamiento no es el adecuado en algún asunto en concreto, en lugar de ponerse a la defensiva o enfadarse como hace la gran mayoría de la gente, lo usan a su favor. Es decir, la opinión la ven como una crítica constructiva, un nuevo punto de vista y, sobre todo, una excelente oportunidad de tenerlo en cuenta para la próxima. Para mejorar.
“¡Seguiré luchando!”
Casi como un grito de guerra, esta frase nunca debería ser olvidada. La vida no es ‘un camino de rosas’, y por ello nuestra mente debería estar tan higienizada como para que, aunque te tropieces varias veces, sepas levantarte con elegancia de dichas caídas y… ¡seguir adelante!
“Esto es lo que quiero”, "Voy a por todas"
Sobreprensar no es bueno, aunque difícilmente evitable porque tenemos un cerebro con el que lo hacemos y, por mucha meditación que se realice, es difícil tenerlo en completo equilibrio, pero si tienes una hoja de ruta 'escrita' no la desvíes a la primera de cambio. Repítete a ti mismo todas las veces que haga falta “esto es lo que quiero”, y vuelve a valorarlo de nuevo: te darás cuenta que la conclusión es la misma.
No te quieras adelantar al futuro, modificando tus planes a medio o largo plazo. Debes estar seguro de tu intuición y decisiones. Espera y apuesta siempre por eso que deseas y buscas con tantas fuerzas. Lo conseguirás, no te quepa duda.
Estas frases son solo una pequeña ayuda para que, por lo menos, empieces el día con ánimo y creyendo en ti. Porque, desgraciadamente, en cuanto salgas de casa habrá alguien que se encargará -consciente o inconscientemente- de hacerte dudar de tu valía y, seguro, muchas virtudes. ¡Sé inteligente emocionalmente y que no te afecte ni lo más mínimo!