Último giro para Daniel Sancho: una única esperanza a tres semanas vista y los extraños movimientos de su entorno

Daniel Sancho tiene por delante la presentación del recurso de su defensa, que deberá estar entregado antes del 29 de enero de este año

JC
José Confuso

Director digital de Lecturas

Daniel sancho
MAX

Los recursos en Tailandia no son como en España. De hecho, su ordenamiento jurídico poco tiene que ver con el nuestro. Las dificultades a la hora de enmarcar las pretensiones de la defensa de Daniel Sancho y la traducción fehaciente de las mismas han hecho que los abogados del hijo de Rodolfo Sancho hayan pedido hasta tres ampliaciones de plazo. La última fecha, la que parece que será la definitiva, es el 29 de enero ya de este 2025.

Será entonces cuando la defensa del joven ponga sobre la mesa la última esperanza que le queda. Sancho cumple prisión provisional en una de las cárceles más complicadas de Tailandia. No es la peor, al menos por lo que se ha ido dibujando durante los últimos meses, pero tampoco es la de Koh Samui, más tranquila y menos atestada de presos. En una celda húmeda, que comparte con otros doce reos, Sancho cuenta los días.

El hijo de Rodolfo Sancho se mantiene firme en su concepción. El papel de la defensa en el recurso que prepara, tal y como ha ido pudiendo saber este medio, es desvirtuar los errores que se cometieron durante la investigación y que desembocaron en la sentencia más dura que podían esperar. No llegó a la pena capital pero sí a una cadena perpetua que Sancho debería cumplir en Tailandia.

Los últimos movimientos del entorno de Daniel Sancho

No es habitual que alguien que se encuentra en prisión provisional desde hace ya más de un año tenga movimientos en sus redes sociales. Pero así ha ocurrido. Al menos, así se ha documentado. La cuenta de instagram de Daniel Sancho, privada desde que el joven perdió el acceso a su teléfono tras la detención en Koh Samui, revivía durante unas horas para mostrar al mundo cuatro fotografías tiernas y familiares del joven.

Rápidamente volvió al estado que ha tenido en estos meses de instrucción y juicio pero el gesto no dejó de ser llamativo. La dura condena que ha recibido el hijo de Rodolfo Sancho desde Tailandia ha dejado poco margen. El tribunal ha considerado culpable a Daniel Sancho de todos los delitos que se le imputaban y tan solo optaba por rebajar la pena a cadena perpetua por su colaboración inicial con las autoridades locales.

Con una imagen pública completamente desvirtuada, el equipo de defensa lucha por cambiar la sentencia con el recurso que plantea. Son muchos los puntos que los abogados de Sancho no ven claros y pretenden que ahora el tribunal revise. Algo que, según se ha manifestado desde expertos en derecho tailandés, no suele ser habitual. Los tribunales suelen mantenerse cercanos al primero de los pronunciamientos.

Unas fechas marcadas

Daniel Sancho ha empezado este 2025 con las miras puestas en el día 29 de enero. Será entonces cuando su defensa presentará el recurso y comenzará el plazo para su última esperanza. El joven permanece en la cárcel de Surat Thani. Las condiciones que han trascendido sobre el trato a los presos no son, desde luego, esperanzadoras. Con una prisión atestada de reos y donde las prerrogativas son escasas, Daniel Sancho espera paciente.

Unas celdas húmedas y con hasta 12 reos de las que no suele salirse demasiado. Hasta mediodía pueden permanecer sin abandonar su celda, en muchos casos durmiendo en el suelo. La comunicación con el exterior tampoco es sencilla. Por el momento se desconoce si bien Rodolfo Sancho o Silvia Bronchalo han podido viajar a Tailandia para acompañar a su hijo en estas fechas navideñas.

A pesar de que la relación entre los progenitores de Daniel Sancho no es la mejor, a juzgar por el cruce de acusaciones públicas que hemos vivido, su interés por su hijo no varía. Ambos le han acompañado en los momentos clave del proceso. El actor ha sido quien se ha centrado en su defensa y en armar el equipo legal que ha estado asesorándole. Son estos los que preparan el recurso con el que pretenden obtener un mejor futuro para el joven.