Mientras que la sociedad se divide entre quienes creen que los hermanos Menéndez actuaron en defensa propia y quienes aseguran que cometieron el crimen para heredar una millonaria herencia, una serie de pruebas podrían cambiar su futuro. Aunque fueron condenados a cadena perpetua sin condicional, esta sentencia podrá verse sometida a algunos cambios e incluso los acusados por el escandaloso crimen de sus padres podrían volver a ser libres. Todo dependerá de la revisión del caso que ya tiene fecha.
Nuevas pruebas determinantes en el caso
Los hermanos Erik y Lye Menéndez fueron condenados a cadena perpetua en uno de los juicios más mediáticos de la historia de Estados Unidos por el asesinato de sus padres. No obstante, ellos siempre han señalado que cometieron el crimen en defensa propia justificado los hechos por una presunta trama de abusos sexuales que sufrían. Jamás hablaron de premeditación. Aun así, la Justicia no les creyó. Han pasado 28 años y siguen en la cárcel, pero podrían salir pronto si las nuevas pruebas halladas demuestran su versión de los hechos. El caso que recrea la plataforma ‘Netflix’ como un true crime será revisado ya que las nuevas pistas pueden probar los abusos sufridos. Una de las principales pruebas que se presentará en la revisión del caso es una de las cartas que Erik le envió a su primo meses antes de cometer el crimen.
El escrito recoge un espeluznante relato del chico quien asegura sufrir abusos por su padre. En la carta señaló también que vivía intranquilo, con miedo y que su padre estaba loco. Este importante testimonio escrito hace más de 26 años podría evidenciar la complicada situación que afrontaban los hermanos Menéndez. Otra de las pruebas que se va a analizar es un importante relato que señala al padre de los hermanos como responsable de los actos que estos destaparon tras su asesinato. Según Roy Roselló, ex miembro de la banda musical Menudo, también sufrió abusos de José Menéndez en los años 80 cuando él apenas tenía 14 años. El abogado de los condenados, Cliff Gardner, ha señalado que si el crimen se hubiera producido ahora no habrían sido condenados por asesinato de primer grado sino por homicidio.
Lo cierto es que en los años 90 no existía el mismo grado de concienciación sobre los abusos sexuales masculinos que a día de hoy. Sin pruebas irrefutables, era complicado para una víctima demostrar que sufrió tal delito. El letrado cree que la Justicia estadounidense anulará la condena y que saldrán de prisión después de casi 30 años entre rejas. La revisión del caso es la última baza a la que se agarran los hermanos para poder gozar de nuevo de la libertad tal y como la conocían. Ha sido el propio fiscal, George Gascón, quien asegura que la revisión del caso es una obligación moral y ética. En caso de que las nuevas pruebas no puedan demostrar los presuntos abusos, su causa se cerrará para siempre y los hermanos Menéndez deberán de cumplir su condena hasta la muerte.
El trauma de los hermanos pudo tener un papel clave en el crimen
Aunque la Justicia no creyó a los hermanos Menéndez , distintos familiares y amigos descararon como testigos los abusos que estos sufrían. Aun así, es evidente que los testimonios no fueron suficiente para justifica los terribles actos que cometieron. Los hermanos dispararon con una escopeta al padre por la espalda mientras veía la televisión en el salón e instantes después cargaron contra su madre quien huía de la escandalosa escena. Quienes todavía semana a los hermanos sin escrúpulos no comprenden cómo pudieron unos hijos terminar con la vida de sus padres con esa sangre fría.
La periodista Carmen Corazzini ha señalado en el diario ’20 minutos’ que los traumas “alteran áreas claves del cerebro encargadas de regular las emociones, el miedo o la toma de decisiones”. “Se puede ver mermada la capacidad para detectar amenazas, evaluar riesgos, controlar impulsos o razonar con claridad”, explica la periodista. Es por este importante motivo que los jóvenes podrían haber asesinado a sus padres sin miramientos. Lo cierto es que el presunto trauma de abusos que vivieron los hermanos Menéndez no se tuvo en cuenta durante el juicio. Por eso ahora, durante la revisión del caso, el trauma vivido será uno de los asuntos claves que se abordarán pase lo que pase. Será el próximo 29 de noviembre cuando la Fiscalía de Los Ángeles revisará la causa de los condenados en 1996. A partir de este día, su futuro podría cambiar por completo.