¡Ojo! La principal causa del temblor de párpado y por qué es una señal de alerta para nuestro cuerpo

El cuerpo envía señales como el temblor de ojo o los problemas digestivos para alertarnos de que estamos sobrepasando nuestros límites

Alicia Alarcón
Alicia Alarcón

Redactora digital de Lecturas

Párpado
PEXELS

¿Cuántas veces has oído la frase "cuando el cuerpo nos habla, hay que escucharle"? Por muy extraño que suene, es una verdad como un tempo. El cuerpo humano es muy sabio y reconoce cuándo estamos forzando más de la cuenta nuestra actividad física o mental. De hecho, cuando llevamos un ritmo de vida demasiado acelerado nos alerta a través de distintas señales de que algo no va bien y el temblor de ojo es uno de ellas.

El cuerpo es 'nuestro templo'

La expresión 'mi cuerpo es mi templo' hace referencia a lo importante que es para nosotros cuidar de él, ya que nuestra salud dependerá de su estado. Para muchos, la rutina del día a día puede ser demasiado agotadora. Hay quienes se encargan de las tareas del hogar, de ir al trabajo e incluso de cuidar a los niños y sacar de paseo a las mascotas, aunque, a veces, llega un punto en el que debemos parar. Demasiada actividad física o mental puede deteriorar nuestra salud tanto a largo como a corto plazo y puede provocar afecciones como la depresión, diabetes, Alzheimer u otras cardiovasculares. De hecho, según los expertos, cuando una persona está demasiado agotada es cuando enferma.

Al parecer, el estrés crónico provoca inflamación en el cuerpo y con ella la aparición de enfermedades relacionadas. Esto ocurre porque nuestro sistema inmunitario se debilita. Para evitarlo, debemos mantener una rutina equilibrada en cuanto a carga de trabajo y descansar lo suficiente para que nuestro cuerpo pueda recuperarse. Se ha demostrado también, que cuando nos tomamos unas vacaciones es cuando enfermamos, ya que es el momento en el que "bajamos la guardia" y nos tomamos un respiro para disfrutar de la vida. 

El cuerpo sabe cuándo debemos parar

Entre las señales a través de las que nos advierte el cuerpo destacan los problemas digestivos o las dificultades para conciliar el sueño. Uno de los motivos más comunes suele ser el estrés por una gran carga de trabajo o la ansiedad que esta nos pueda provocar. Otros signos de alerta importantes a tener en cuenta son los dolores de cabeza o la presión en el pecho. Podría decirse que uno de los síntomas más comunes es el temblor que ojo, que puede aparecer hasta en niños. Esta alerta se manifiesta con contracciones musculares o espasmos involuntarios y muy rápidos en el párpado.

Aunque la persona que lo padece lo siente de manera intensa, es poco perceptible a los ojos de los demás. Habitualmente, su ritmo es constante y puede durar hasta varios minutos. Para entenderlo mejor, hay quienes lo describen como un "tic" en el ojo. Este movimiento recibe el nombre de 'mioquimia palpebral' y se produce por cansancio, estrés, falta de sueño fijar la vista durante demasiado tiempo o por exceso de alcohol o café. Según César Cristobal, miembro de la Asociación Española de Optometristas Unidos, “se ha relacionado con una irritación de las fibras nerviosas que inervan al músculo o bien con una disfunción protuberancial a nivel del núcleo del facial. La incidencia de este síntoma no está precisada, aunque no resulta infrecuente verlas en las consultas de neurología”.

A priori, estos espasmos de manera puntual no son peligrosos y no necesitan ningún tipo de tratamiento. De hecho, uno de los mejores remedios es descansar. En caso de que estos espasmos se prolonguen durante horas podrían ser preocupantes. El experto César Cristobal asegura que, en esos casos, "podría ser un síntoma de patologías graves como la parálisis facial o la esclerosis múltiple”. Aunque parezca algo pasajero y puntual, no debemos pasar por alto ninguno de estos síntomas ya que son señales de que algo no funciona bien. Para solucionar el estrés o ansiedad, se debe acudir a un experto que ayude a localizar cuál es el problema para solucionarlo a la mayor brevedad posible.

'Tips' para mejorar nuestros hábitos

Para evitar problemas de salud tanto físicos como mentales, podemos llevar a cabo ciertas actividades que potencien el bienestar personal. En primer lugar, debemos saber que nuestra salud mental es igual de importante que la física y debemos cuidar de ella también. Para mantener la mente despejada, los pasatiempos son una buena opción. Hay quienes apuestan por la pintura, mientras que otros prefieren las manualidades, leer o la música. Todas ellas, son actividades que ayudan a concentrarse y bloquean los pensamientos intrusivos.

Programar descansos es otra herramientas muy útil para relajarse y es ideal durante el trabajo o mientras llevamos a cabo cualquier otra actividad. También, los expertos recomiendan hacer ejercicio físico con frecuencia por los distintos beneficios que tiene para la salud de las personas. En definitiva, existen muchas vías y alternativas al día a día que nos ayudaran a evadirnos por un momento de la realidad.