En ‘Lecturas Diario’ te desvelamos quién hay detrás de las duras pruebas que ponen a los Supervivientes, de esta y otras muchas ediciones anteriores, al borde de sus fuerzas físicas y mentales. Es un italiano con mucha experiencia en el ‘reality’ de supervivencia: son 20 ya los años que lleva contribuyendo al éxito de un formato que siempre engancha.
En el argot, Davide Castenetto es un ‘set builder’, es decir, constructor e ingeniero de juegos para contenidos audiovisuales. Seguramente, a los directivos de Supervivientes España les debió costar mucho dar con este talento tan específico. Y es que solo son diez, contando con él, los profesionales en el mundo que se dedican a esta materia tan concreta.
Davide, concretamente, es el inventor de juegos tan clásicos para el gran público del concurso de telerrealidad como, por ejemplo, ‘La Noria Infernal’, ‘el Duelo al Sol’ o, también, ‘El potro del vértigo’. Este último uno de los más ambiciosos de esta edición por sus extremas peculiaridades: se tarda en construir hasta tres días, con anclajes al suelo del mar de hasta dos metros de profundidad, y pesa 500 kilos. Una estructura compleja e incluso peligrosa.
Trabaja ya con los hijos de los primeros trabajadores de SV
Castennetto habla para ‘20 minutos’ para compartir su inigualable experiencia en Cayos Cochinos, la playa donde habitualmente se retransmiten estos apasionantes juegos, donde principalmente recalca sus dos décadas de experiencia en el formato internacional: "Llevamos 20 años juntos con el mismo grupo. Ahora estoy trabajando con los hijos de los primeros chicos que contraté, así que tenemos una buena historia", sentencia.
Cuando el italiano se adentra a comentar la edición actual, en la que destacan por su gran competitividad concursantes como Kiko Jiménez o Miri de ‘MasterChef’, revela un dato sorprendente que no se sabía hasta ahora. “En esta edición de Supervivientes hemos llegado a entregar hasta hoy 91 juegos. Solo para esta edición, para esta temporada" explica.
¿Cuál es el secreto del éxito? Pregunta difícil de responder, pero Davide también tiene respuesta para ella: "Si no arriesgas, no da espectáculo, se queda muy soso. Tienes que llegar al límite calculando que nadie se haga daño, porque la seguridad está antes que todo, la seguridad es lo primero".
Solo hay diez como él en el mundo
Y, desde luego, otro verdadero triunfo para el ingeniero debe ser formar parte de la exclusiva lista de los poquísimos especialistas en el mundo que se dedican en exclusiva al diseño y desarrollo de juegos para espectáculos en televisión. Davide confiesa que no existe ninguna escuela que forme en esta materia, pero reconoce que sí tuvo “buenos maestros” en sus inicios.
Queda claro, por tanto, que no cualquiera puede hacer este trabajo. Ya que más allá de idear y desarrollar estos juegos todas las semanas, Castenetto prueba todos sus inventos antes de que los aguerridos concursantes se monten en sus pruebas. "Quiero tener la sensación que van a tener los concursantes y desde ahí le doy los ajustes necesarios, como este año con la evolución de la Noria Infernal", explica también para el diario gratuito.
Por delante: él siempre prueba todos los juegos
Davide, que se pone en la piel de los jugadores porque la seguridad y el bienestar de los famosos es lo principal para el italiano, reconoce también lo importante que es el trabajo en equipo en la isla. Sin ellos, nada de lo que se hace sería posible. Y pone un buen ejemplo: la construcción de ‘El desafío al sol’ de este mismo domingo: "Detrás hay dos soldadores profesionales, cuatro carpinteros, albañiles... se construye de forma minuciosa y es largo. Y luego se juega cinco minutos, pero tiene que ser perfecto, no hay lugar para los fallos".
Para terminar su entrevista en ‘20 minutos’, Davide da un detalle con el que queda más que claro lo elemental que es su labor y opinión en ‘Supervivientes’. Y es que el italiano lidera incluso en aspectos del concurso que no son estrictamente de su ámbito. Por ejemplo, para esta misma edición los directivos le permitieron construir la palapa más grande de la historia del formato, es decir, el plató de la isla. "Necesitaba un poco de aire fresco, de entusiasmo. Yo llevaba tres años proponiendo, proponiendo, proponiendo... y este año ha colado", explica orgulloso.