El nombre de Rosa Vallejo puede sonar desconocido si no le ponemos cara, pero lo cierto es que estamos hablando de la abuela más viral de España. Con más de un millón y medio de seguidores en 'Instagram' y más de 9 millones en 'TikTok', su éxito es imparable y es una auténtica estrella en las redes sociales. Hace más de una década, comenzó a ser protagonista de los vídeos de su nieto, Christian Morales, con quien comparte su día a día y nos enseñan a vivir con la sonrisa puesta, a pesar de las adversidades.
A lo largo de todos estos años, no han dejado de innovar y de las parodias han evolucionado a divertidos 'challenges' (retos), vídeos en los que comprueban la verdad tras los trucos más virales y hasta cámaras ocultas, algunas de ellas destapadas rápidamente porque cada vez son más los que reconocen a esta mujer de 84 años con tanta energía como ganas de vivir y hacernos reír de la mano de la persona a la que más quiere.
Los dos han visitado el plató de 'Y ahora Sonsoles' y han contado cómo surgió la idea de ponerse frente a la cámara, sin la pretensión de convertirse en influencer. "Hay que seguir para adelante", ha comenzado Rosa su intervención en el programa de 'Antena 3'.
Los inicios de la abuela de España en las redes sociales
No hay nadie como ella en las redes sociales y es que Rosa Vallejo ha conquistado millones de corazones con su sentido del humor, compartido junto a su nieto cada día en sus perfiles de 'Instagram' y 'TikTok'. En su visita a 'Y ahora Sonsoles', la presentadora ha comenzado subrayando su energía, porque con 84 años no para y nos demuestra que la edad es solo un número y que nunca es tarde para comernos el mundo.
Fue Christian, su nieto, el que empezó a a hacer vídeos en redes sociales porque quería ser periodista: "Empecé en 'YouTube' y en 'Instagram' a hacer vídeos de humor, como un propio programa de presentador y un día metí a mi abuela". Ella "se dejó" y descubrieron que juntos forman uno de los mejores tándems que hayamos podido ver.
La abuela más viral de España y su posible salto a la televisión
Rosa ha participado ya en numerosas entrevistas en prensa escrita, radio y televisión, pero ha sido Sonsoles Ónega la que le ha preguntado por sus honorarios, ya que se plantea la posibilidad de ficharla para su programa. "Yaya, apunta, una sección contigo aquí todas las semanas", le ha dicho su nieto después del coqueteo de la periodista, enamorada de lo que transmite una mujer que no deja de sacarnos sonrisas.
Christian Morales ha explicado que la parte económica depende de "las marcas", pero no solo son las de un público objetivo las que se interesan por el contenido que crea junto a su abuela, sino que también muchas de 'target' juvenil les proponen acciones, como fue el caso del finalista de la octava edición de 'Masterchef', Alberto Gras, quien llevó a cabo una divertida campaña con Rosa con su propuesta gastronómica de hamburguesas 'Deleito'.
"Promociona alimentación, champús, aparatos auditivos, grandes almacenes...", continuaba él antes de que su abuela apostillara con un simpático "de todo lo que se puede". Graban vídeos por las tardes y ahora ya les salen "como churros".
Una abuela gamberra que quiere "hacer reír a las personas"
"Yo quiero salir a hacer reír a las personas", ha dejado claro Rosa, que con solo dos años perdió a su madre y con cuatro a su padre, porque "murió de pena después de quedarse solo con seis hijos". Se ha criado con su hermana mayor, quien falleció cuando tenía 96 años y ahora tiene una relativamente cerca, en Badalona, ya que ella vive con su nieto en Barcelona.
Su nieto, Christian, tampoco ha tenido una vida fácil y tuvo que enfrentarse a la pérdida de su madre cuando tenía 9 años, pero a pesar de las adversidades los dos han creado un equipo lleno de amor y sonrisas que no guardan de forma egoísta, sino que la reparten por toda España y más allá de nuestras fronteras.
Abuela y nieto celebraron sus 10 años creando contenido juntos en redes sociales con cámaras ocultas en las que gastaban bromas a la gente en la calle. Muchas de las personas la reconocían en cuanto aparecía, pero algunos cayeron en la divertida trampa, regalando momentos desternillantes que se hicieron virales.