Las redes sociales e internet han generado una gran necesidad de hacer lo mismo que se ve a través de la pantalla. En caso de no hacerlo, hay quienes se arrepienten de quedarse en casa tras ver las publicaciones en redes de sus amigos.
La realidad es que salir no siempre significa encontrar la felicidad o satisfacer nuestras necesidades. Los expertos señalan hay que seguir el camino que más nos apetezca en cada momento y no dejarnos guiar por lo que hagan los demás.
Qué es el FOMO
Cuando hablamos de FOMO (Fear Of Missing Out) nos referimos al miedo a perderse las cosas, entre ellos planes, viajes o comidas. Es una tendencia muy habitual entre jóvenes quienes pasan muchas horas en internet. Como resultado, tienen la necesidad de apuntarse a todo y mostrar en redes sociales su presencia, ya que quieren formar parte de todo y del “mundo perfecto” que se muestra.
De hecho, cuando un grupo de jóvenes queda para ir al cine, salir a cenar o simplemente para tomar algo en un bar tiene la necesidad de etiquetarse y subir a redes el contenido que ya ha publicado otro integrante del grupo. Esta actitud es el resultado de querer demostrar el “yo estuve ahí”.
Los expertos alertan de que lo que vemos en redes no siempre es real y no es exactamente como lo vemos. Las personas que publican contenido sobre sus vidas tienden a idealizarlas y exponerlas mejor de lo que son realmente. De no ser así, ni siquiera las mostrarían. El FOMO es el resultado de mostrar constante en redes algo que se considera atractivo o cautivador para los ‘viewers’. Además, es una actividad que, generalmente, hace sentirse mejor a quienes la practican.
Ya son muchos los expertos quienes que animan a cuestionar la vida al otro lado de la pantalla. Decidir qué nos gusta y qué queremos hacer sin depender de la influencia de terceros puede ayudarnos a sentirnos mejor o, simplemente, hacernos más felices. Para superar este síndrome se recomienda centrarse en uno mismo, en el entorno en el que se vive y las personas que te rodean. Empezar a vivir la vida tal y como es aceptando quedarnos, en ocasiones, fuera es una forma de terapia.
Según explica la psicóloga Cynthia Zaiatz al medio Infobae, el FOMO es una tendencia muy habitual entre jóvenes. “Es algo que veo mucho en mis pacientes. El miedo a no subir una foto o no mostrar en dónde están”, señala. Este síndrome se basa en la figura económica de las personas. Por ello, son muchas las que, en ocasiones, ‘falsean’ o intentan aparentar algo que no son para tener mejor apariencia en redes sociales. Y como dice el dicho, “las apariencias engañan”. Como resultado, las redes sociales alteran la realidad y hacen que los logros en la vida parezcan inalcanzables para muchos. El resultado, son personas infelices e insatisfechas con lo que tienen. El síndrome del FOMO siempre impulsa a las personas a querer más elementos en su vida.
Qué es el JOMO
El JOMO (Joy Of Missing Out) es todo lo contrario, el placer de perderse planes y quedadas entre amigos o familiares. Es el resultado de vivir experiencias sin importar la exposición que tenga una actividad o el número de likes. Surge de aquí la frase muchos habrán escuchado, “si no has subido fotos es que te lo has pasado genial porque estabas disfrutando del momento”.
Este es un término que se asocia más con personas adultas o mayores, ya que normalmente no tienen esa necesidad de exponer en redes todo lo que están haciendo. Los expertos recomiendan hacer en cada momento lo que a uno le apetezca sin depender del “qué dirán” lo demás. Esta es, probablemente, la clave del éxito y la felicidad.
Los psicólogos aseguran que es muy tóxico vivir sumergido en las redes y que toda nuestra vida gire entorno a ellas. Al fin y al cabo, las redes deben ser un medio de entretenimiento en el que no podemos basar toda nuestra vida, porque de ser así, siempre seremos inconformistas e infelices con lo que tenemos.