Nuevo giro en el caso Daniel Sancho: el dardo de un criminólogo, experto en detección del engaño, a Carmen Balfagón y Ramón Chipirrás

La abogada y el portavoz, también criminólogo, de Rodolfo Sancho, han tenido un importante papel en el proceso judicial de Daniel Sancho desde España y también en Tailandia

Pablo Casal
Pablo Casal

Coordinador digital de Lecturas

Carmen Balfagón y Ramón Chipirrás en Koh Samui
GTRES

El proceso judicial de Daniel Sancho ha tenido numerosos protagonistas hasta su demoledora sentencia en primera instancia, condenado a cadena perpetua por el asesinato premeditado de Edwin Arrieta. Los nuevos giros en el caso, que elevan el peso de personas como el testigo al que presuntamente intentó comprar Rodolfo Sancho, no incorporan caras desconocidas, aunque cambie el foco mediático en la trama. Carmen Balfagón y Ramón Chipirrás han sido, prácticamente desde la detención del hijo del actor, dos personajes principales, dado que además de su papel como abogada y criminólogo, han sido portavoces de la familia en numerosos programas de televisión. También han sido los peritos encargados de elaborar los informes y el documento de alegaciones que enviaron tras el juicio al tribunal.

A punto de que se cumpla un mes de la lectura del dictamen, son muchos los expertos que siguen desgranando el caso y la actuación de las partes en el procedimiento. El 10 de septiembre, de hecho, la Universidad de Educación a Distancia en Vitoria organizaba un seminario para llevar a cabo ese análisis desde el punto de vista criminológico y Juan Ángel Anta, uno de los especialistas, experto en detección del engaño, que participaron en esa jornada ha compartido sus conclusiones, con un dardo hacia los dos miembros del equipo legal de la defensa de Daniel.

La crítica de Juan Ángel Anta, criminólogo, a Carmen Balfagón y Ramón Chipirrás

Juan Ángel Anta es criminólogo y experto en lenguaje no verbal, así como en detección del engaño, algo fundamental para el análisis de perfiles psicopáticos o delincuenciales, que en muchas ocasiones desarrollan o traen consigo, innatas, habilidades suficientes para sortear las preguntas evitando contar la verdad. El especialista no solo ha analizado el caso desde el punto de vista de los datos o el perfil criminológico de Daniel Sancho, sino que también ha hecho una crítica relacionada con un detalle que está relacionado con el equipo legal que formó el padre del condenado por el asesinato de Edwin Arrieta. De hecho, en el vídeo que ha publicado en su propio canal de 'YouTube' comienza abordando esa cuestión antes de entrar en materia y explica su punto de vista con su opinión, pero también acudiendo a la Ley.

"Para hacer un análisis o un informe criminológico se necesitan peritos y uno criminológico, como los demás del aparato de la justicia, debería ser un profesional independiente que debe valorar los hechos de la manera más imparcial posible", apunta sobre su presentación. Aunque entiende que no hay un conflicto de intereses con que ese papel lo desempeñe alguna de las partes, en lo que se refiere a su equipo jurídico, pero sí ha querido recalcar esa imparcialidad necesaria para elaborar un documento de tal relevancia al tribunal que va a tomar posteriormente una decisión judicial. "Un perito no debería poder ser el portavoz de una familia, porque en ese caso el que hable en nombre de ellos, del supuesto agresor, de la víctima, debería ser otra persona", sentencia el Doctor en Criminología.

La promesa de los peritos criminológicos: uno de los papeles de Carmen Balfagón y Ramón Chipirrás

Los peritos, al llevar a cabo esos informes, como los que han llevado a cabo Carmen Balfagón y Ramón Chipirrás a lo largo del proceso judicial de Daniel, incluyen un apartado importante denominado "promesa", que ha citado Juan Ángel para entender la relevancia de la neutralidad en su compromiso y acudiendo al artículo 335.2 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal: "El profesional que suscribe manifiesta, bajo promesa de decir verdad, que ha actuado y, en su caso, actuará con la mayor objetividad posible tomando en consideración tanto lo que pueda favorecer como lo que sea susceptible de causar perjuicio a cualquiera de las partes, y que conoce las sanciones penales en las que podría incurrir si incumpliere su deber como perito".

"El perito tiene que valorar el caso de la forma más objetiva posible, que aunque sea de alguna de las partes tiene que tratar de ser muy objetiva", se reiteraba tras acudir a ese fragmento que incluyen cuando envían sus conclusiones a un magistrado o tribunal. No deben, entonces, llevar a cabo esa tarea "peritos que vayan a formar luego parte de la investigación judicial". "Digo esto porque los criminólogos tenemos muchas ganas de entrar como tal en las instituciones públicas y bastantes problemas nos están poniendo ya como para que encima haya alguna pequeña confusión con esto y se piense que alguien que cumpla con ese rol pueda ser también el portavoz de la familia, porque no debería ser así", vuelve a criticar el experto.

Ya en el segundo episodio del documental 'El caso Sancho', en 'Max', estrenado en la plataforma el viernes, 13 de septiembre, pudimos ver a los dos criminólogos del equipo de Rodolfo Sancho junto al actor, en una reunión en la que se podía comprobar que el padre del entonces acusado llevaba la voz cantante y tenía muy clara la estrategia y los puntos clave que quería destacar en el informe que tenían que enviar a la Corte de Koh Samui de cara a convencer con todo el argumentario de la defensa al juez y librar a su hijo de un escenario que, por el momento, no han podido evitar, aunque mantienen la esperanza puesta en los recursos.