Rociana del Condado es un tranquilo pueblo de Huelva de menos de 10.000 habitantes donde 'la sed de venganza' se ha saldado con el asesinato de un anciano de 75 años. El cruento asesinato a golpes de un adolescente menor de edad en una pequeña farmacia del municipio ha culminado con la detención de este que, inmediatamente, fue puesto a disposición judicial y ahora permanece interno en un centro de menores a la espera de juicio. Pero, ¿qué le llevó a un chaval de tan solo 17 años apalear así al septuagenario?
Pues bien, el hombre de avanzada edad dejó huérfano de padre al joven cuando en 2020 mató de un disparo certero al padre del menor simplemente por tener sospechas de que este había entrado en sus huertos. Pero, además, para mayor escarnio del hijo de la víctima mortal, gracias al pago de una fianza millonaria el asesino pudo librarse de los 15 años que la Audiencia Provincial de Huelva le impuso como condena por un cruel crimen que consternó a un pueblo entero.
El menor se ensaña con un anciano senil
Ya era mayor entonces, y solo pasó un año en prisión. Pero hay una explicación. El hijo del anciano fallecido “tenía varias enfermedades”, ya entonces, y además se detectó "que tenía el lóbulo frontal con muchos microinfartos, deficiencia senil y Alzheimer". Por ello, salió de prisión rápidamente para pasar a una libertad condicional que solo le obligaba a "tener que ir todos los lunes a firmar al cuartel de la Guardia Civil".
Ahora, cuatro años más tarde, Rociana del Condado tiene que velar a la segunda víctima de una retorcida trama que el hijo del campesino tiroteado no ha olvidado ni un solo día desde aquel disparo a bocajarro contra su progenitor. El juicio todavía tiene que explicar si fue premeditado o no y, también, si el anciano murió por las heridas de la brutal paliza sucedida dentro de la farmacia del pueblo, pero lo cierto es que el rencor y odio al ejecutor de su padre en mitad del campo ha sido constante durante todo este tiempo.
El hijo del anciano, recientemente fallecido tras varias semanas hospitalizado desde la paliza, lo ha corroborado al manifestar en Canal Sur Televisión que tanto él como su familia han recibido "amenazas e insultos", e incluso detalla una amenaza de muerte directa que pocos días antes del violento suceso el de 17 años le hizo en plena calle, a la vista de otros vecinos. Le dijo que "o moría él o su padre" y, además, trató "de agredirlo" físicamente.
"Se lio a puñetazos con él" por ser el ejecutor de su padre
Desgraciadamente, en febrero se dieron las circunstancias propicias que cerrarían este retorcido círculo de crímenes. Según relata también el hijo del anciano apalizado, así sucedió todo dentro del establecimiento farmacéutico en el que siempre reina la calma. "Estaban en el mostrador, el chaval y su madre, los estaba atendiendo, la madre se giró, vio a mi padre que estaba hablando con una persona mayor, sentados los dos en un asiento que hay en la farmacia, y la madre le dijo al de la farmacia que la atendiera ligero. Cuando la atendieron, se giró el chaval, vio a mi padre allí y simplemente, sin nada, se lio a puñetazos con él".
Varios testigos confirman la desagradable escena que el hijo del septuagenario fallecido agradece de cara al juicio pero que, por otro lado, le han decepcionado completamente. En un pueblo tan pequeño casi todo el mundo se conoce, por lo que lamenta profundamente que esos vecinos de toda la vida que presenciaron el hecho "no hicieran nada para ayudarlo o no se atrevieron".
El detonante: un disparo mortal a bocajarro en 2020
El anciano apaleado por 'la sed de venganza' del joven que en el centro de menores acaba de cumplir la mayoría de edad, testificó tras el asesinato sucedido el 5 de mayo de 2020, en plena tarde, que “tenía sospechas de que el autor de las sustracciones” fuera el padre del menor porque incluso había verificado como “arrancaba algunas vainas de habas sembradas”, por lo que el día de autos se acercó a él con la escopeta y, “tras mediar unas breves palabras con éste, a sabiendas de la probabilidad de que pudiera causarse la muerte o al menos consciente de que ponía en peligro su vida y aceptaba ese resultado”, efectuó de frente un disparo limpio, a una distancia de entre tres y cinco metros, que impactó directamente en la cara de la víctima mientras quien le acompañaba en ese momento huía del lugar a la carrera.
Pronto está oscura crónica de asesinatos y venganzas llegará a su fin con el juicio al menor que no ha dudado en llevar a la práctica la frialdad del ‘ojo por ojo’ cuatro años después. Quedan así dos hijos huérfanos de padre asesinados en trágicos sucesos. Les marcará de por vida, de la misma forma que este doble asesinato relacionado quedará para siempre sellado en la historia, ahora teñida de negro, de un intachable pueblo andaluz donde la alegría, la hospitalidad y la amabilidad le convierten en un maravilloso lugar, cómodo y seguro para vivir.