Después de que el tradicional Chupinazo inaugurara ayer los Sanfermines de este año, hoy ha tenido lugar el primer encierro de las fiestas. La carrera ha estado protagonizada por los toros de La Pasmosilla y ha sido algo más accidentada de lo esperado con seis traslados hospitalarios y varios heridos por traumatismo craneoencefálico. Uno de ellos ha sido trasladado por una herida de asta de toro.
El primer encierro de los Sanfermines
Las campanas de la Iglesia de San Fermín junto al cohete que ha prendido a las 8 de la mañana daban comienzo al primer encierro de este año. La primera carrera de los Sanfermines de 875 metros de recorrido ha estado protagonizada por los toros de La Pasmosilla de Trifa (Cádiz) en las calles de Pamplona. Una ganadería variada de pelaje con tonos negros, castaños y sardos que ya ha llevado a cabo varias carreras en los encierros de San Fermín desde su debut en 2019 y se considera una de las más rápidas. Como cada año, la carrera ha comenzado en la pronunciada cuesta de Santo Domingo y su trayecto ha recogido la Plaza del Ayuntamiento, Mercaderes, Estafeta, Telefónica y el tradicional callejón. Varios cabestros han pasado por encima de un joven que caía en mitad de la Plaza del Ayuntamiento durante el emocionante y peligroso encierro. Los cabestros han abierto el paso a la manada con rapidez mientras llegaban a la pronunciada curva de la calle Estafeta. La angustia llegaba cuando uno de los toros negros se desviaba hacia el lado derecho.
A la entrada de la plaza de toros caían varios corredores que, finalmente, han conseguido levantarse antes de que se formara una peligrosa aglomeración. La carrera terminaba poco después de llegar a la plaza de toros donde dos de los bovinos rezagados y separados de los cabestros han alimentado la tensión entre los allí presentes. Han llegado a dar hasta tres vueltas durante casi dos minutos alrededor de la plaza de toros mientras llegaban cada vez más corredores a la arena. La situación ha sido peligrosa, aunque los toros no han llevado a cabo ninguna embestida en los aleñados del burladero. Los dobladores han conseguido guiar de nuevo a los dos toros desviados de su rumbo para terminar con la carrera. El encierro ha concluido a los 4 minutos y 12 segundos de dar comienzo con la salida de esos dos toros rezagados de la plaza. Finamente, han abandonado la plaza concluyendo el encierro que ha dejado más heridos de lo esperado.
Los heridos han sido trasladados al hospital
Tal y como señala el parte provisional de los heridos del primer encierro, 6 corredores han tenido que ser trasladados este domingo al hospital, a pesar de que las primeras informaciones reflejaban 8 heridos. La mayoría de ellos han resultado heridos por distintas contusiones. Se trata del primer encierro de tal magnitud para la ganadería de La Palmosilla. Según ha informado el Gobierno de Navarra, un vecino de Beriáin de 37 años ha sido trasladado de urgencia al Hospital Universitario de Navarra por una herida de asta de toro en el paladar que, a priori, "no es grave". Por el momento, se mantiene con pronóstico reservado a la espera de una nueva valoración.
Otro de los trasladados tiene una herida en el cuero cabelludo y un traumatismo craneoencefálico. Tal y como recoge el parte de los heridos, uno de ellos ha perdido el conocimiento durante el traslado por un traumatismo craneoencefálico, pero ha llegado al hospital consciente. Otro de los heridos también ha llegado consciente con un traumatismo maxilofacial. El quinto de los trasladados que ha caído en la entrada de Mercaderes tiene una contusión con deformidad en el brazo y el sexto de los heridos otro traumatismo craneoencefálico. Tal y como ha trascendido, tres de los trasladados son de Navarra, uno de Madrid, otro de Castellón y uno de origen extranjero que ha venido desde Nueva York. El balance médico no refleja heridos de gravedad a pesar de que seis de ellos han sido trasladado a las dependencias hospitalarias. De momento, continúa la fiesta en las calles de Pamplona. Será mañana cuando de comienzo el segundo encierro de San Fermín con una de las ganaderías más peligrosas, los Ceba Gago.