EXCLUSIVA | Jose Capote, responsable del informe psicológico en el caso Errejón: "Son seis veces en las que Elisa Mouliaá le dice que no"

El especialista ha sido el encargado de elaborar la evaluación psicológica para valorar la verosimilitud de las declaraciones

Pablo Casal
Pablo Casal

Coordinador digital de Lecturas

El psicólogo Jose Capote

El caso Errejón ha dado un importante giro esta semana con la entrega de los informes psiquiátrico y psicológico aportados por la acusación particular. El primero de ellos, basado en la evaluación de Elisa Mouliaá (36 años), concluye que se dio "una situación de abuso" por parte del expolítico (41).

El psiquiatra José Cabrera considera que se produjo "un verdadero atentado contra la intimidad" de la actriz, además de poner de relieve los puntos en los que quedaría constatada la "coherencia" en lo declarado por la también presentadora ante el juez Adolfo Carretero para ratificar su denuncia por presunta agresión sexual.

En la revista Lecturas hemos hablado en exclusiva con el psicólogo Jose Capote, que ha llevado a cabo un escrupuloso análisis de las palabras pronunciadas por el exportavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados ante el magistrado, cuando declaró como investigado el pasado 16 de enero.

El doctor es tajante al explicar cómo quedaría demostrado que "no hay un consentimiento implícito" por parte de la presunta víctimay lo explica con "seis muestras" correspondientes a varios momentos de la noche de autos, siempre subrayando la forma de narrarlo del propio Íñigo Errejón.

La primera muestra de que no hay un consentimiento por parte de Elisa Mouliaá

En las versiones de Íñigo Errejón y Elisa Mouliaá hay un claro elemento discordante y es el consentimiento. Mientras el expolítico insiste en que sí se dio, la actriz es rotunda para especificar, incluso, los momentos en los que le paró los pies y le dijo, además, "no es no. Parece mentira que te lo tenga que recordar a ti".

Versiones de Íñigo Errejón y Elisa Mouliaá
'¡De viernes!'

Jose Capote nos explica la primera muestra detectable en el discurso del investigado que dejaría claro que no se da esa aprobación: "Habiendo ellos quedado en un ambiente privado, en un bar, ella le manifiesta que se vayan una fiesta. Cambian un contexto privado por uno público, social, donde hay más gente".

Jose Capote observa otras muestras con carga de la falta de consentimiento

Aunque la primera señal puede ser tomada, nos explica Jose Capote, como una primera voluntad de marcar distancia y algo "más blanda", la segunda es "mucho más clara": "En el ascensor ya hablamos de cosas más significativas. Él dice, en sus propias palabras, -yo le dije que iba a romper la tercera regla, le dije que le iba a dar un beso y le di un beso-".

Para el psicólogo hay una clara "afirmación" y "lo correcto hubiera sido que le hubiera preguntado". "En realidad no se lo pregunta, sino que se lo impone, se lo dice y si se lo dice es porque no tiene las señales suficientes de un consentimiento implícito", continúa con el análisis.

Íñigo Errejón y Elisa Mouliaá
GTRES

Pero Capote prosigue con la que sería la tercera, que "casi tiene más carga" y se observa en la narración del exlíder de 'Más Madrid' cuando ya se ubica en la fiesta: "Están a punto de besarse y él dice -yo le cogí la mano y la llevé a la habitación- y en ningún momento cuenta que consensuaran el hecho de ir a una habitación y hace un gesto de llevársela".

Todo esto, además, se sostiene con la conversación que Elisa tiene con una amiga a través de whatsApp en la que le dice que se la lleva a esa habitación en la casa en la que se estaba desarrollando la fiesta.

Un análisis exhaustivo con claras señales en el discurso de Errejón

Jose Capote se ha centrado en "lo que dice el propio Errejón" en una declaración en la que se hacen evidentes más muestras. "La cuarta se da en la habitación, porque él reconoce que Elisa le dice -esto es un canteo-", nos detalla el doctor, que resta importancia al motivo de esa frase concreta, ya que lo cierto es que "ella le corta", algo que "ambos reconocen".

Cuando el expolítico le dice a la actriz que se quiere ir, ella le manifiesta que prefiere quedarse: "Ella no se quiere ir y entonces él lleva a cabo una estrategia. Pide un taxi programado para 30 minutos, para que cuando llegue él le pueda decir que el taxi está esperando, como él mismo reconoce, con lo que le aprieta y se va con él por eso".

Íñigo Errejón en el coche
GTRES

"Ella dice que sube con él, pero estando ambos arriba en casa le vuelve a parar y él dice que le para porque estaba preocupada por su hija, que estaba enferma. Es una vez más en la que le dice que pare", expone Capote sobre la última de las muestras de que no hay un consentimiento implícito.

Además, al psicólogo le llama poderosamente la atención que "cuando están esperando al taxi, ambos reconocen que se quedan hablando y si estuvieran en un contexto sexual consentido, durante esos cinco o diez minutos, nos preguntamos por qué no siguen teniendo un comportamiento sexual".

Jose Capote, convencido de que el "no" de Elisa Mouliaá está implícito en seis ocasiones

El psicólogo ya había trabajado previamente junto a Alfredo Arrién, abogado de la acusación particular y fue él quien le preguntó "si quería participar en este caso": "A partir de ahí, vi las declaraciones y le dije que iba a analizar para ver qué podía extraer". Para ello, ha estudiado al detalle el testimonio de Íñigo y Elisa sobre sus propios actos.

"Son seis veces en un tiempo de entre seis y ocho horas que Elisa le dice que no. Son dos personas jóvenes, sexualmente activas y hubieran quedado al día siguiente, pero nunca quedaron", concluye en resumen Jose Capote, que también explica que "son muchos los motivos por los que alguien soporta un maltrato, una agresión" o algún tipo de situación similar.

Elisa Mouliaá, en '¡De viernes!'
'¡De viernes!'

"La conclusión final es que evidentemente no hubo consentimiento por parte de Elisa Mouliaá. De hecho, la parte reduccionista es que si hubiera habido consentimiento, hubiera habido relaciones sexuales", resume el doctor en nuestra conversación. En su perfil de 'Instagram', (@capotepsicologos), dejaba claro que "cuando no existen pruebas objetivas, la psicología explica "los porqués"".